madrid. La factura de la luz subirá a partir de enero de 2011 hasta un 10%, aunque el Ministerio de Industria tendrá la última palabra. Así se desprende de la subasta de energía que se celebra cada tres meses con el objetivo de fijar los precios que se aplican a los consumidores con menos de 10 kilovatios de potencia contratada. De este modo, la factura de un usuario medio podría registrar un aumento de alrededor de cuatro euros mensuales.

La Tarifa de Ultimo Recurso (TUR) de la luz subirá previsiblemente en enero el 9,9% después de que la decimotercera subasta entre comercializadoras de último recurso (Cesur) se cerrara con un alza del 21,3% con respecto a los resultados de octubre.

El producto base subastado ayer para el primer trimestre de 2011, de 4.000 megavatios (MW), se vendió a 49,07 euros por megavatio hora (MWh), lo que supone un incremento del 4,5%. Este producto es el que se utiliza en la fórmula de la TUR, a pesar de que en la puja también se vendió otro producto punta de 306 MW por 53,99 euros por MWh, un 1,86% más que en octubre.

No obstante, una vez realizados los ajustes correspondientes, referidos a pagos por capacidad, primas de riesgo, desvíos o traslado de consumos de base a hora punta para cubrir los momentos de mayor demanda, el incremento final quedó fijado en el 21,3%.

Este coste de la energía obtenido en la subasta tiene un peso cercano al 50% en la fijación de la TUR. La factura del TUR es la suma de dos componentes. Uno es la subasta Cesur, por lo que depende de la evolución del mercado y sus costes; y otro es el peaje, establecido por el Gobierno para retribuir los costes del sistema (redes, primas de energías renovables y otros conceptos).

La revisión de enero será la primera de la TUR en 2011. Durante 2010, Industria aplicó dos subidas, una en enero, del 2,6%, y otra en octubre, del 4,8%. Estos incrementos se produjeron a pesar de que en julio y en octubre el departamento dirigido por Miguel Sebastián apostó por congelar la parte regulada de la tarifa.

La TUR afecta a cerca de 27,1 millones de consumidores con menos de 10 kilovatios (kW) de potencia contratada que no hayan querido contratar el suministro en el mercado libre.

Pese al incremento, el precio de la electricidad seguirá siendo más barato en España que en el resto de los mercados de referencia europeos, entre ellos los de Italia (67 euros por MWh), Francia (57), Alemania (52) y Reino Unido (60).

Por su parte, Facua-Consumidores en Acción consideró ayer que si el Gobierno aplica en enero una fuerte subida de la luz demostrará que le interesan más las eléctricas que los consumidores, indicó un portavoz de la organización.

Además, criticó el sistema de subastas, ya que este mecanismo supone seguir una "política teledirigida por las multinacionales eléctricas basada en una doble farsa en el sector", añadió Facua.