PARÍS. La Agencia Internacional de la Energía (AIE) revisó hoy al alza sus previsiones sobre la demanda mundial de petróleo tanto para este año, en parte por la ola de frío de las últimas semanas en el hemisferio norte, pero sobre todo para 2011, en un contexto de precios al alza.
En su informe mensual sobre el mercado petrolero, la AIE aumentó en 130.000 barriles diarios sus expectativas de consumo para este año, de forma que ahora espera una media de 87,4 millones de barriles diarios, lo que significa un incremento del 2,9% respecto a 2009.
La razón es la constatación de que en el tercer trimestre los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) absorbieron más crudo de lo anticipado, sobre todo gasóleo, pero más todavía en los tres últimos meses del año.
Además, se ha constatado que en China las medidas de racionamiento eléctrico ha conducido a la proliferación del uso de generadores autónomos, que funcionan con derivados del petróleo.
Los autores del estudio reconocieron que la ola de frío reciente en el hemisferio norte y las medidas de racionamiento eléctrico en China, de mantenerse, podrían generar más demanda a corto plazo e incrementar la tensión en los mercados.
No obstante, puntualizaron que dados los bajos precios del gas, que cada vez sustituye más al petróleo como combustible de las centrales eléctricas, está reduciendo progresivamente el impacto del fenómeno climátco.
La AIE incrementó en 260.000 barriles sus proyecciones de consumo global para 2011, aunque puso el acento en que esa corrección no modifica la tendencia a la ralentización del ritmo de subida interanual al 1,5% con 88,8 millones de barriles diarios.
De hecho, para el año que viene augura que las necesidades de la OCDE disminuirán un 0,5% el próximo ejercicio, después de haber subido un 1,1% en el actual.
La agencia, en la revisión semestral de sus perspectivas a medio plazo, modificó también al alza sus datos en el horizonte de 2015, con 1,5 millones de barriles suplementarios respecto a lo calculado en junio pasado.
La razón de esa subida hasta una demanda de 93,4 millones de barriles diarios en 2015 tiene que ver en particular por la alteración de los presupuestos de base de 2010 y 2011, en los que se han incorporado 1,1 millones de barriles diarios más.
En todo caso, los autores del estudio pusieron el acento en que no hay cambios en la tendencia descendente del consumo en la OCDE en el periodo 2011-2015, con una rebaja media de 300.000 barriles diarios cada año.
Por lo que respecta a la producción, en noviembre aumentó en 400.000 hasta 88,1 millones de barriles diarios, el mayor nivel alcanzado hasta ahora.
El ascenso del mes pasado se explica muy marginalmente por la contribución de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), que en conjunto introdujo en el mercado 45.000 barriles diarios para llegar a 29,2 millones de barriles.
La oferta suplementaria vino de otros productores que no pertenecen a ese cártel, en particular de Canadá y Kazajistán (tras el fin de las operaciones de mantenimiento en algunos de sus pozos) y de Brasil, por la puesta en marcha de plataformas.
En cuanto a las proyecciones a medio plazo, la AIE espera también una oferta superior en 1,5 millones de barriles diarios entre 2009 y 2015 respecto a la que había previsto en junio.
En total, confía en que en 2015 se extraerán una media de 98 millones de barriles diarios, cuando en 2009 eran 91,4 millones.