MADRID. En un pleno extraordinario en el Congreso sobre empleo, Zapatero dijo que el Gobierno "desearía sentirse acompañado por la mayoría de los grupos" de la Cámara a la hora de afrontar este reto, que "no tiene marcha atrás".

Al respecto, les advirtió a los partidos de que "de cada uno" dependerá la consecución de un pacto que reforzará la "posición como país", algo que, precisó, redundará en beneficio de los futuros pensionistas y que contribuirá al "horizonte de estabilidad" de las cuentas públicas.

Según explicó Zapatero, antes de que el Ejecutivo envíe su proyecto de ley a la Cámara esperará a que la comisión parlamentaria del Pacto de Toledo haga sus recomendaciones sobre la reforma de pensiones, como se ha hecho desde 1995.

El presidente recordó que el Gobierno, por medio del ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, ha pedido a la comisión que apruebe sus recomendciones antes de que concluya este año.

A renglón seguido, el Gobierno comenzará a redactar el proyecto de ley y empezará a discutir su contenido con los agentes sociales, añadió el jefe del Ejecutivo.