El Banco de España prevé que, a finales de este año, los incrementos salariales recogidos en los convenios se contengan algo más, debido a que la reforma laboral permite a las empresas con problemas no aplicar las subidas acordadas.

En su último boletín económico, el regulador asegura que en los últimos meses la evolución de la negociación colectiva está confirmando un "mayor" grado de moderación salarial que a principio del ejercicio.

Esta tendencia se ha visto favorecida por la "escasa" inflación de 2009 (el 0,8% en diciembre), que, recuerda la entidad, "desactivó" el efecto de las cláusulas de salvaguarda, que se aplican cuando la inflación real supera a la prevista y tienen como objeto evitar pérdidas de poder adquisitivo de los trabajadores.

También a la contención de las revalorizaciones salariales ha contribuido el acuerdo de negociación colectiva firmado en febrero de este año por las patronales CEOE y CEPYME y los sindicatos CC.OO. y UGT para 2010-2012, destaca el Banco de España.

No obstante, advierte de que, hasta el momento, no se ha notado en el sector privado el recorte aplicado por el Gobierno a los salarios de los funcionarios.

Además, indica el regulador que son "relativamente escasos" los convenios firmados hasta el tercer trimestre, pues afectan a 5,1 millones de trabajadores (cifra inferior en un tercio a la del mismo período de 2009).

Mientras que los convenios revisados fijan un incremento salarial del 1,3% para 2010 (un punto porcentual por debajo de lo pactado un año antes), los de nueva firma contemplan alzas inferiores, en línea con el tope del 1% que acordaron sindicatos y empresarios en febrero.

Por ello, el Banco de España considera que en el tramo final del año las subidas salariales podrían contenerse "algo más" tras la aprobación de la reforma laboral, que incluye la posibilidad de que las empresas en situación económica vulnerable recurran a las causas de inaplicación salarial, las conocidas como cláusulas de descuelgue.

Esta mayor moderación permitirá que los costes laborales unitarios sigan corrigiéndose, apunta el supervisor.