MADRID. Algunas cadenas de televisión autonómicas, como Telemadrid y Canal Sur, se han visto obligadas a suspender sus emisiones debido a la jornada de huelga general en contra de la reforma laboral.

En TVE, donde el seguimiento de los paros a última hora de la mañana, según fuentes de la dirección de la cadena, se situaban en un 22,7 por ciento, los espacios en directo de la programación matinal no se han emitido y en lugar se han ofrecido varias películas.

En el grupo Antena 3, según fuentes de la dirección el seguimiento de los paros ha sido, hasta las 12:00 horas, de un 5,6 por ciento. Antena 3 TV ha ofrecido por la mañana la programación habitual, incluido el espacio en directo "Espejo Público" que presenta Susanna Griso.

En Telecinco también se ha emitido en directo el programa que presenta Ana Rosa Quintana y espera poder ofrecer esta tarde un programa grabado de "Sálvame Diario".

La Sexta, donde han secundado el paro en todo el grupo un 0,2 por ciento -según la dirección-, está previsto emitir especiales-resumen con imágenes de programas ya emitidos de sus espacios vespertinos "Se lo que hicisteis", "El Intermedio" y "Buenafuente".

En Cuatro la programación matinal no se ha visto alterada, y el programa matinal presentado por Concha García Campoy se ha emitido con normalidad.

Los espacios informativos de la mañana en estas cadenas de ámbito nacional se han desarrollado sin incidentes.

En cuanto a las cadenas autonómicas, Telemadrid, sobre una foto fija de la sede central de la cadena, explica a sus televidentes desde la pasada medianoche: "La huelga general, convocada por los sindicatos contra la reforma laboral del Gobierno de la nación, impide la emisión".

Canal Sur también sobre una imagen fija del logotipo de la cadena informa: "Nuestra programación se está viendo alterada a causa de la huelga general convocada por los sindicatos de clase contra la reforma laboral aprobada por el Gobierno".

En la Televisión valenciana la huelga está siendo secundada por el 3,34 por ciento de los trabajadores, según fuentes de la dirección, aunque los sindicatos sitúan dicho porcentaje entre un 20 y un 40 por ciento.