La entrada de turistas extranjeros a España creció un 4% en agosto, "más del triple de lo que se esperaba", hasta siete millones de turistas, según anunció ayer el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, lo que supone que en el periodo acumulado la llegada de turistas internacionales se mantiene en positivo. Durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso, Sebastián señaló que estos datos, recogidos en la Encuesta de Movimientos Turísticos de Frontera (Frontur), confirman que se ha cerrado "una buena campaña turística" y destacó especialmente la recuperación del mercado británico, que estaba languidecido, del mercado francés y del italiano. Para Sebastián "ahora hay que apostar por una oferta sostenible, amplia y que traiga a turistas de mayor poder adquisitivo y de países como China y Rusia".