vitoria. Iberdrola ha dado esta semana otro paso en la consolidación de su liderazgo mundial en generación de energía verde al adjudicarse la instalación del mayor parque del mundo bajo el mar. Se trata de un negocio incipiente, apenas explorado, basado en el aprovechamiento de las corrientes marinas. La marea sustituye debajo del agua al aire que mueve los aerogeneradores en la superficie marina o los montes. Sin embargo, la eléctrica vasca ya tiene autorización para instalar 105 turbinas subacuáticas en aguas de Escocia en dos fases, según informaron a este diario fuentes de la compañía.

No hay fecha concreta para la puesta en marcha del proyecto. De hecho, Iberdrola está todavía en fase de fabricación del prototipo de molino que ha logrado la adjudicación. Se trata de un modelo pionero que cuando se produzca en serie se convertirá en el más potente de su disciplina con un megavatio (MW), lo que supone multiplicar por tres la potencia de los que operan en la actualidad en parques experimentales.

La capacidad de generación junto al tamaño de la segunda fase del programa escocés -95 turbinas- le permitirán convertirse en el parque más grande dentro de su segmento de generación de energía verde. Las máquinas estarán situadas a unos cien metros de profundidad. Tampoco se ha valorado el coste de la instalación ni la facturación que generará para Scottish Power Renewables, la filial escocesa de Iberdrola Renovables.

No será posible definir ninguna de esas dos cuestiones hasta que sea testado el prototipo de la turbina y se ajuste sus potencialidades tanto de cara a la generación de energía como de su propia fabricación. Iberdrola, a través de la empresa noruega Hammerfest Strom -de la que posee un 17%- invertirá cuatro millones de libras -4,9 millones de euros en la implementación del arquetipo del HS1000, la innovadora turbina. La fabricación en cadena y la adjudicación de nuevos parques permitirá abaratar notablemente los costes de producción.

iberdrola y escocia No es casualidad que Iberdrola se haya hecho con los permisos para la instalación de las dos fases del proyecto en Escocia. La apuesta del Gobierno escocés por las energías renovables encontró un importante resorte industrial tras la integración de Scottish Power en Iberdrola en 2007.

La eléctrica vasca es líder mundial de generación de electricidad limpia y suma a sus activos tangibles -rondará los 12.500 MW de potencia instalada a finales de año- una firme vocación por explorar nuevos campos. Pionero en la instalación de parques de aerogeneradores en suelo firme, ha explorado los horizontes offshore - mar adentro, fuera de la costa en su traducción literal del inglés- ceñidos principalmente en Europa al Mar del Norte, más profundo que el Mediterráneo y el Cantábrico.

En esa localización, Escocia se ha convertido en una referencia gracias a la implicación de sus gobernantes. Durante la firma del protocolo, el primer ministro escocés, Alex Salmond, mostró su satisfacción por la adjudicación a Iberdrola. "En Escocia tenemos, aproximadamente, el 25% de todos los recursos europeos en el ámbito de la eólica marina y la energía de las mareas, así como el 10% del potencial energético de las olas", señaló.

otros proyectos El director de la filial escocesa de Iberdrola, Keith Anderson, recalcó que el objetivo de la compañía es "liderar el desarrollo de nuevas tecnologías renovables en Reino Unido". El primer paso será la instalación de las diez primeras turbinas en el emplazamiento de Sound of Islay en la costa oeste escocesa.

El gigante de 95 molinos bajo el agua se desarrollará en el estrecho de Pentland, al norte de la isla, en una franja marina conocida como Ness of Duncansbay.

Al margen de los generadores sobre o bajo la superficie marina, la otra gran apuesta offshore de Iberdrola son las boyas para el aprovechamiento de la energía que generan las olas. Iberdrola tiene en fase de desarrollo tres grandes proyectos en ese ámbito: frente a la costa de Santoña -donde instaló en 2008 el primer dispositivo del mundo de estas características-, en las islas de Orkeney (Escocia) y en Pasaia, donde participa junto a Tecnalia Research & Innovation en el proyecto Oceantec.