madrid. El secretario de Comunicación de la Federación de Construcción de CCOO (Fecoma-CCOO), Antonio Garde, calificó ayer de "a todas luces insuficiente" la recuperación de 500 millones de euros para la realización de obras públicas anunciada ayer por la vicepresidenta económica, Elena Salgado, y el ministro de Fomento, José Blanco. Garde recordó que, de acuerdo con los cálculos del sindicato, el tijeretazo inicial de 6.400 millones de euros en obra pública iba a suponer la desaparición de unos 115.000 empleos en el sector de la construcción. Con esos 500 millones de euros extra, podrían salvarse, como mucho, hasta 8.000 empleos, según Garde, pero se seguirán destruyendo más de 100.000 puestos de trabajo en el sector. "Bienvenidos sean esos 500 millones de euros, pero son a todas luces insuficientes. Nos parece muy poco lo que el Gobierno ha recuperado", declaró.

En cuanto al anuncio de José Blanco de que las obras del Plan Extraordiario de Infraestructuras (PEI) empezarán a licitarse a partir del próximo mes de septiembre, Garde recordó que eso supone que realmente no se empezará a construir hasta marzo.

Por su parte, en la arena política, todos los grupos parlamentarios de la oposición reclamaron ayer en el Congreso la comparecencia urgente de José Blanco para informar este mismo mes de la distribución del recorte de las obras públicas y de la recuperación de algunos de los proyectos. Según fuentes parlamentarias, la comparecencia fue solicitada inicialmente por los grupos parlamentario de ERC-IU-ICV y Mixto, pero después la reclamó el PP y finalmente también la han demandado las dos grandes formaciones nacionalistas, CiU y PNV. En ese contexto, el PSOE se ha quedado solo y la comparecencia del ministro se da por hecho para este mismo mes. La Diputación Permanente del Congreso dará vía libre a la citación en su reunión del próximo lunes y ya sólo quedará poner fecha. Tanto ERC-IU-ICV y el Grupo Mixto como el PP han pedido la comparecencia de Elena Salgado para explicar las medidas fiscales. Por otra parte, la apuesta del Gobierno de universalizar el contrato de fomento del empleo indefinido no ha conseguido despegar en su primer mes. Los contratos ordinarios -los de indemnización por despido improcedente de 45 días por año- y las conversiones de contratos temporales a fijos suponen nueve de cada diez de los nuevos contratos fijos, mientras solo el 10% del total se inclinan por contratos indefinidos de fomento de empleo con 33 días de indemnización por despido.