madrid. La Mesa del Congreso acordó ayer habilitar el mes de agosto para poder impulsar la aprobación de la reforma laboral que el martes se convalidó en el pleno de la Cámara, y cuya tramitación empezará el próximo lunes con la constitución de la ponencia para admitir enmiendas a la totalidad del proyecto.
Así lo decidido la Mesa, reunida al concluir el pleno del Congreso, después de que ayer mismo el Gobierno remitiera un escrito en el que solicitaba la celebración de las sesiones extraordinarias que sean necesarias de la ponencia, la comisión legislativa y, en su caso, del pleno de la Cámara, a fin de proceder a su tramitación urgente.
El plazo de la ponencia terminará el lunes 5 de julio y, de presentarse alguna enmienda a la totalidad del proyecto, debería examinarse en un pleno que, previsiblemente, tendría lugar en torno al 21 de julio, según han informado fuentes del Congreso de los Diputados.
A continuación, la reforma pasaría a la comisión correspondiente, presumiblemente la de Trabajo e Inmigración, para estudiar las enmiendas parciales que pudieran presentarse. Este proceso, se desarrollaría ya en agosto. Si los diputados así lo acordaran, la comisión podría tener competencia legislativa plena para que el proyecto de ley pasara al Senado, aunque, de no ser así, primero tendría que ser aprobado por el pleno del Congreso.