bruselas. La Comisión Europea redujo ayer en dos décimas, desde el 0,8% hasta el 0,6%, su previsión de caída del Producto Interior Bruto para España en 2010, una contracción que sigue siendo superior a la del Gobierno, que la sitúa en el 0,3%.

En sus previsiones intermedias presentadas ayer, el Ejecutivo comunitario mantiene la previsión de crecimiento anunciada en otoño tanto para la UE como para la Eurozona en el 0,7%.

Según la estimación presentada ayer, España sigue siendo la única de las principales siete potencias económicas de la UE que presentará un crecimiento negativo en el presente ejercicio.

La Comisión Europea especifica que la economía española se contraerá un 0,1% en el primer trimestre, crecerá un 0,1% en el segundo, volverá a caer un 0,2% en el tercero y regresará al positivo en el cuarto con un 0,1%.

adelanto de la demanda El informe presentado ayer relaciona la subida del IVA que entrará en vigor el 1 de julio con la vuelta a la contracción del tercer trimestre, debido a que los consumidores adelantarán sus compras para evitar pagar este impuesto. "El incremento del IVA previsto para mediados de 2010 probablemente provocará un adelanto de la demanda y causará un impacto en el crecimiento del PIB trimestral", asegura el documento.

El texto también dice que "el desempleo récord y el largo ajuste estructural para el sector de la construcción" están dificultando la recuperación de la economía española, cuya actividad se contrajo un 3,7% en 2009, pero mejoró considerablemente del tercer trimestre al cuarto, desde un -3% a un -1%, según sus cifras. "Los esquemas de apoyo a la industria del automóvil y la mejora de la confianza en la segunda mitad del año, en paralelo con la evolución favorable de la demanda externa han contribuido positivamente a este resultado", dice el informe.

Para el presente ejercicio, el Ejecutivo comunitario cree que "el contenido consumo público, junto a las estrechas condiciones de crédito y el final de los efectos positivos de los programas de ayuda al automóvil van a dañar parcialmente la recuperación".

Contribuirán positivamente al resultado español "una recuperación de la demanda doméstica más rápida de lo anticipado", así como un incremento de las exportaciones debido al incremento de la demanda mundial.