bilbao -Concluida la pretemporada, esto comienza.

-Sí. Tenemos muchas ganas de que arranque todo. Una parte del equipo viaja a Argentina, a la Vuelta a San Juan, y el otro competirá en Mallorca. Tengo ganas de ver dónde estamos. La pretemporada ha ido según lo esperado, sin apenas problemas. Los corredores han hecho un gran trabajo

¿Cómo ve al equipo?

-Veo con mucha ilusión a los que vienen nuevos, con muchas ganas de hacerlo bien. Muchos de ellos tienen la idea de recuperar su mejor versión, casos como el de Juanjo Lobato o Rubén Fernández. Antonio Angulo o Joan Bou son corredores con mucha calidad y quieren destaparse aquí. Iturria, Aristi, Lobato y Fernández tienen que tirar del carro. Tienen un plus de motivación. Creo que lo harán muy bien desde el principio. Estoy seguro que todos ellos harán piña y darán un paso adelante. Nos llevaremos alguna alegría. Tenemos ilusión y motivación. Pero hay que ir paso a paso porque es un equipo nuevo. Veremos qué tal funciona la mezcla de veteranía y juventud. Queremos coger una buena dinámica desde el principio para que el equipo fluya. Queremos un equipo con un carácter valiente, de pelea, pero también de realismo. Dentro de nuestras posibilidades pelearemos cada carrera.

Han subido de categoría. También de exigencia, entiendo.

-Hay que tener paciencia con algunos corredores, pero está claro que ha llegado el momento de asumir responsabilidades, de pensar en las victorias. Hay corredores para ello. Hay que exigirles. Tenemos ciclistas por los que apostaremos en más de una carrera. Lógicamente tenemos que ser ambiciosos, pero sin desmerecer el trabajo que se hace con los jóvenes. Con ellos hay que tener paciencia y trabajar con calma. Nuestra seña de identidad tiene que ser dar guerra, ser un equipo guerrero. Los jóvenes tiene que crecer y demostrar que son ciclistas válidos para el futuro.

¿Qué objetivos tiene el equipo?

-Para mí, deportivamente, lo más importante es arrancar muy bien el año. Tener un buen inicio de temporada. Hay una invitación colgando en la Vuelta y lo importante es no dejar dudas en lo deportivo, demostrar que tenemos un equipo compacto para las carreras ProTeam y hacerlo lo mejor posible en las carreras del WorldTour. Y por supuesto, tratar de rendir al máximo en las carreras de casa como la Itzulia, la Clásica de San Sebastián, la Klasika Primavera de Amorebieta o el G. P. Indurain.

¿Considera que tendrán una presión extra al ser la única formación vasca?

-Que seamos la única representación de equipo vasco creo que no debería añadirnos una responsabilidad extra, aunque sabemos que muchos nos mirarán con lupa. Tenemos que centrarnos en hacerlo bien, al detalle y en transmitir en la carretera. Quiero que el equipo plasme en la carretera el trabajo que se está haciendo. Que demostremos que tenemos carreras en las piernas y si llega algún triunfo, mejor que mejor. Eso nos daría confianza.

¿Qué mensaje lanzaría a la afición?

-A la afición le diría que tuviera paciencia, que no haga comparaciones desde el primer día con lo que fue Euskaltel en su día. Este es un equipo más pequeño, más modesto. Hay que darle tiempo. No hay que exigirle desde el primer día. Hay que tener paciencia y tener confianza en los chavales. Hay que saber que la mayoría de los chavales de aquí son gente joven, gente nueva y, evidentemente, les va a costar hacerse al equipo y a la categoría. Eso sí, tengo plena confianza en ellos. Si el engranaje encaja, va a haber un buen equipo

¿Intuye que esto es como volver a empezar?

-Sí. Eso es lo que percibo. Se nota esa ilusión especial. Hay ilusión a raudales. Hay ganas e ilusión en los corredores y en los técnicos y el staff. Con esos ingredientes es más fácil que las cosas salgan bien.