Bilbao - La final de la Liga Kutxabank de pala iluminará mañana el frontón Bizkaia a partir de las 17.00 horas. Dos parejas, con el ánimo intacto y el optimismo por bandera, buscarán con ahínco la victoria para cantar bingo y adjudicarse unas txapelas que ya hicieron suyas el año pasado Dan Necol e Iñaki Urrutia, quienes parten como favoritos ante el binomio formado por Esteban Gaubeka e Ibon Garate.

Las finales, sin embargo, acostumbran a no entender de etiquetas, ni valoraciones previas. Todo puede pasar. Sabedor de ello se mostró durante la elección de material llevada a cabo ayer en el Bizkaia el zaguero Garate, quien encara su primera gran final tras completar uno de sus mejores partidos en la semifinal que sacó adelante el martes junto a Gaubeka.

"Fue uno de los partidos en los que más sólido he estado. Empecé haciendo tres faltas con el saque en el primer joko, pero me tranquilizó ganar el primer set y después me dedique más a meter la pelota a buena", advirtió el propio Garate, quien espera estar "tranquilo" mañana ante una engrasada pareja que "lleva una semana sin jugar, pero están entrenando al mismo ritmo de los partidos y durante la liguilla se ha visto que les han hecho muy pocos jokos".

"Cruzan muy bien la pelota e intentarán anular a Esteban para cargarme de trabajo a mí. Cuando cargas mucho a un zaguero, el castillo se puede venir abajo, pero intentaremos quitarle también trabajo a Dan y cargar el juego hacia Urrutia", advirtió asimismo el de Sopela, que ve trascendental sellar el primer joko para "ganar en confianza" después de morder el polvo ante Necol y Urrutia en los dos partidos de la liguilla por 3-0 y 3-1, si bien entiende que fueron "resultados engañosos".

NECOL NO SE FÍA Necol, por su parte, quitó importancia al hecho de haber ganado junto a Urrutia todos los encuentros disputados en el campeonato, pues "lo más difícil es ganar la final". "Habrá que jugar al máximo, pero estamos muy bien", avisa el galo antes de la batalla definitiva por las txapelas.