Sigue aquí en directo a Gonzalo en su tercera etapa a través de este link.

Roncesvalles amanece con el cielo raso y despejado eso hace que haga bastante frío.Hoy ya he tenido la oportunidad de disfrutar de eso que llaman las historias del camino. He desayunado con Pascuale, un italiano que lleva ya realizados doce caminos, pero lo mejor de todo es que tiene 78 años. Va tranquilo realizándolo. Empezó en Lourdes y va a terminar en Lisboa tras pasar por Fátima; es decir, bastante más de todo lo que voy a hacer yo. Mucho ánimo amigo.

Ya en la entrada y después de unas fotos de mi amiga Oneka me espera Amaia con la que voy a realizar la etapa de hoy hasta Pamplona

Amaia, que vive en un pueblo llamado Obanos cerca de Pamplona, ya ha realizado esta travesía alguna que otra vez y que mejor guía puedo tener que ella.

Comenzamos tranquilos, pero ya dentro de poco tenemos que pararnos en El Espinal. El calor empieza a apretar y hay quitarse alguna capa de ropa.

Tras varias subidas y bajadas, me cruzo, mejor dicho adelanto, a la persona con la cual había tenido oportunidad de compartir litera en Roncesvalles. Se trata de José, un chico que está realizando el camino solo hasta Logroño como toma de contacto tras más de 14 años sin realizar ejercicio. A por ello.

La zona del bosque de Erro es simplemente espectacular y, tras ella, una bajada fulgurante hasta Zubiri donde hacemos un pequeño parón para sellar la credencial.

Toca ahora transitar pegados a la carretera que une Pamplona con Zubiri por unos senderos muy bonitos junto al río Arga.

Vamos bastante bien de ritmo pero aflojo un poco ya que todavía me queda mucho camino por delante.

Tras alguna que otra subida y bajada complicada llegamos ya a a Pamplona, donde pasamos bajo el arco de España, con sus imponentes murallas, y sacamos una foto en la Plaza del Ayuntamiento.

Hemos terminado con éxito la segunda etapa de esta aventura.

Santiago está ahora un poco más cerca. Buen camino.