La bochornosa derrota del sábado pasado en Balaídos fue un duro golpe a la moral y también a las opciones de seguir en Primera División que tenía el Deportivo Alavés. Ahora bien, pese a que se necesite un auténtico milagro para salvar esos muebles que llevan más dos años resquebrajándose, el conjunto babazorro está obligado a levantarse de la lona y luchar hasta el final en honor a su distinguida afición, la cual no le ha abandonado hasta el momento y tampoco lo hará esta tarde, a las 19.00 horas, en Mendizorroza.

El contrincante, en esta ocasión, será el Espanyol; otro equipo, al igual que el celeste, que no se juega nada, y que, a diferencia del anterior, alberga el poder de descender matemáticamente al Glorioso. Algo que ocurrirá seguro si los albiazules no suman ningún punto, pero que, tras la sorprendente victoria del Granada frente al Athletic en Los Cármenes, puede suceder incluso si se consiguen los tres y el Cádiz hace lo propio mañana en su visita a Anoeta, donde espera una Real Sociedad en horas bajas.

Con tal objetivo en mente -el de remar mientras haya posibilidades-, ha afrontado Julio Velázquez el inicio de la semana. El técnico salmantino ha intentado mantener la normalidad en el día a día y, tal y como manifestó en su comparecencia previa, aún no ha dado su brazo a torcer. No obstante, para apurar al límite sus opciones, la escuadra vitoriana va a necesitar ofrecer una imagen completamente diferente a la que se le vio en tierras gallegas, pues allí solo el Celta aparentó querer llevarse el triunfo.

En lo que respecta a la lista del Alavés, las principales novedades son los regresos de Rubén Duarte y Gonzalo Escalante, quienes se perdieron el viaje a Balaídos por sanción; y las bajas de Edgar Méndez, que cumple ciclo; y Ximo Navarro, expulsado durante ese mismo partido ante el Celta. Además, cabe recordar que John Guidetti tampoco entrará en la convocatoria y que todavía se mantiene en duda, aunque descartado como titular, Manu García, ausente sobre el césped del bastión celeste debido a unas molestias musculares que cortaron su racha de participación.

Lo lógico, entonces, sería la vuelta tanto del lateral almeriense como del centrocampista argentino al once, el cual, eso sí, podría presentarse con alguna variación más a raíz de la debacle sufrida en Vigo. Sobre todo, si el futbolista asturiano vuelve a quedarse fuera, ya que la solución que se inventó el preparador babazorro para mantener el dibujo -esto es, introducir a Toni Moya en una posición a la que no está acostumbrado- no solo no hizo olvidar su falta, sino que empeoró al equipo.

El Espanyol, por su parte, llega a esta antepenúltima jornada del campeonato liguero en la misma situación que lo hizo el Celta en la anterior. Los periquitos, recién ascendidos a la máxima categoría, han logrado su objetivo con creces, puesto que han llegado a la recta final del curso sin apenas preocupaciones, y aterrizan en Vitoria-Gasteiz dispuestos a romper su mala racha -tres derrotas y un empate en las últimas cuatro fechas- y, de esta manera, terminar la campaña lo más arriba posible en la tabla.

Para ello, el entrenador blanquiazul, Vicente Moreno, tendrá a toda la plantilla a su disposición a excepción, salvo repentina mejora, del carrilero Adrià Pedrosa; y, por otro lado, el propio técnico valenciano dejó claro en su comparecencia de ayer que, pese a las imágenes que captaron las cámaras durante el partido contra el Real Madrid, mantiene una gran relación con su delantero Raúl De Tomás, quien pidió perdón en redes sociales tras su gesto al ser sustituido en el Santiago Bernabéu.

Jornada 36ª. Pese a que su inicio en el banquillo no fue el esperado, pues, aunque empató en el Metropolitano, no pudo pasar del empate en la visita del Celta a Los Cármenes, el periplo del gasteiztarra Aitor Karanka por tierras andaluzas está muy cerca de convertirse en un rotundo éxito. El técnico alavés ha conseguido que el Granada reaccione -algo que no logró el interino Torrecilla- y, con dos triunfos consecutivos, se ha colocado en una posición inmejorable para asegurar la permanencia en Primera División. La última de esas dos victorias llegó ayer, cuando los granadinos recibieron al Athletic, que se jugaba sus opciones de luchar por puestos europeos, y pudieron superarle gracias a un gol de Álex Collado, uno de los futbolistas más destacados en esta recta final del curso. Además, cabe mencionar que los rojiblancos se quedaron con un jugador menos debido a la expulsión de Vesga.