- El sábado, en el minuto 39, mientras Fekir celebraba con la afición su gol olímpico, Joan Jordán recibía el impacto de una barra lanzada desde la grada. El partido fue suspendido por el colegiado Ricardo de Burgos Bengoechea y reaudado ayer al mediodía.

Con alineaciones distintas, sin Joan Jordán y sin público el Betis venció (2-1). En rueda de prensa, Julen Lopetegui, entrenador del Sevilla, se mostró “triste por la eliminación” de su equipo de la Copa del Rey. No obstante, señaló que es necesario “poner el foco” en que su futbolista. “Jordán no ha podido jugar por la agresión y un parte médico”, explicó.

“O condeno o no condeno, o blanco o negro. Me toca los cojones, con perdón, que Jordán no esté en el campo cuando la cabeza no la puso él ni él suspendió el partido. El perjudicado es el agredido”, sentenció.

Por el lado verdiblanco, Manuel Pellegrini, técnico del Betis, estaba “contento por estar en la siguiente ronda, pero amargado también porque se le ha hecho un daño muy grande por parte de un descerebrado”. Además, pidió “hacer una investigación” sobre el suceso que obligó a suspender el partido del sábado porque ignora “si un tubo de plástico hace tanto daño”, ya que “otras muchas veces no se suspendieron los partidos por estos casos”.

“Si se hubiera manejado todo con un poco más de grandeza este partido se hubiera jugado con público en las gradas y todo hubiera sido más bonito”, subrayó el preparador chileno, para el que, en el plano deportivo, fue “una eliminatoria disputada en la que ganó el que vio puerta”. El técnico bético, dijo estar “de acuerdo con Lopetegui” en que “es un acto punible que agredan a un jugador” pero insistió en hacer “una profunda investigación” para determinar “si lo que pasó era para irse de la cancha”.