- La lacra de la violencia machista vuelve a ser noticia. El Gernika Rugby Taldea ha despedido de manera fulminante a un jugador de su plantilla después de que se haya interpuesto contra él una denuncia por presunta agresión física a su pareja. Según informó ayer el propio club foral en un comunicado en las redes sociales, los hechos se produjeron en la noche del pasado 31 de diciembre.

El conjunto basurde, que milita en la máxima categoría del rugby estatal, explicó que el jugador fue despedido “inmediatamente”, el día de año nuevo tras tener conocimiento de los hechos: “Los valores de rectitud, honestidad e integridad que caracteriza al rugby son también los valores del Gernika Rugby Taldea y, en coherencia con ellos, reafirmamos nuestro compromiso contra la violencia machista”.

El presidente del equipo, Iñaki Uribe, precisó que el jugador supuestamente implicado en dicha agresión procede de una de las islas que conforman Oceanía en el Pacífico Sur y es uno de los internacionales con los que cuenta el Gernika. Uribe explicó en Radio Euskadi que la Ertzaintza les informó de que la supuesta agresión se había producido de madrugada y les pidió su colaboración para acceder a la vivienda y les comunicó que había detenido al jugador por la mañana y contra el que adoptó “las medidas que debía de tomar”.

Uribe destacó que tras tener conocimiento de lo ocurrido por la información que les trasladó la Policía vasca, “reunimos a la junta directiva del club y decidimos expulsarle en aplicación del reglamento interno que tenemos con los jugadores”. “Nosotros tenemos unos valores y no podemos admitir ningún acto de este tipo entre nuestros jugadores”, argumentó el máximo responsable del Gernika Rugby Taldea.

“No vamos a prejuzgar si (la agresión) es realidad o no es realidad o lo que sea; eso seguirá sus cauces oportunos, pero nosotros ya cortamos de raíz con él porque esto no se puede tolerar”, indicó Uribe, tras mostrar su apoyo a la mujer agredida. El club manifestó su respaldo a la concentración que se celebró en la tarde de ayer en la villa foral para protestar por esta supuesta agresión machista, aunque el equipo no participó en la misma por encontrarse en Sevilla, donde juega mañana.