- El Tribunal Supremo dio la razón al futbolista Gerard Piqué y anuló la multa de 2,1 millones de euros que le impuso Hacienda al concluir que el defensa no simuló contratos para gestionar sus derechos de imagen y que las cotizaciones que abonó a la Seguridad Social británica mientras jugaba en el Manchester United cuentan como “gasto deducible” del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Así, el Supremo ha condenado a la Administración a devolver a Piqué las cantidades que se hubieran pagado de forma indebida, con sus correspondientes intereses de demora.