BENFICA Vlachodimos; Verissimo, Otamendi, Vertonghen; Lazaro (Gilberto, min.45), Weigl, Joao Mario, Grimaldo (Almeida, min.75); Rafa Silva (Pizzi, min.86), Yaremchuk (Taarabt, min.75) y Núñez (Ramos, min.86).

BARCELONA Ter Stegen; Eric Garcia, Piqué (Gavi, min.33), Araujo; Sergi Roberto (Mingueza, min.89), F. De Jong, Busquets (Nico, min.68), Pedri (Coutinho, min.68), Dest; L. De Jong (Ansu Fati, min.68) y Depay.

Goles 1-0, m.3: Darwin Núñez. 2-0, m.69: Rafa Silva. 3-0. m.79: Darwin Núñez, de penalti.

Árbitro Daniele Orsato (ITA). Amonestó a Otamendi, Rafa Silva, Grimaldo y Weigl, en el Benfica; y a Piqué, Dest y Nico, en el Barcelona. Expulsó por doble amarilla al visitante Eric Garcia (min.87).

Estadio Estádio do SL Benfica, de Lisboa.

- El FC Barcelona encajó una nueva goleada ayer ante el Benfica (3-0), en la segunda jornada de una fase de grupos en la que es colista, después de un pésimo resultado que le deja contra las cuerdas. El conjunto de Ronald Koeman ni disparó entre los tres palos y no se sobrepuso al gol inicial de un equipo local que toma ventaja en el pulso por estar en los octavos de final de la Champions.

Los azulgrana no pescaron puntos en el Estádio Da Luz, sino tres goles en contra. Los mismos que encajaron en el Camp Nou a manos del Bayern de Múnich, líder sólido del grupo con el Benfica como escudero. El Barça afrontaba casi una final, y la perdió sin dar buena imagen y con varios señalados. Se sonrió ante el Levante, pero en Da Luz el Barça siguió con el modo off y sin brillo ni gloria.

El equipo catalán se topó con un partido adverso de inicio, como le sucedió en la Liga en casa contra el Granada, y entonces salvó un empate in extremis. En Lisboa, en un estadio que empujó a su equipo, el Barça intentó no demorar la remontada pero su buena reacción inicial se fue deshinchando. Y sin disparar a portería, con llegadas ineficaces, sin puntería. Al final, casi sin llegadas al área de Odysseas Vlachodimos.

Y la buena reacción inicial del Barça al primer gol en contra se disipó, en parte, por un cambio insólito como fue quitar a Piqué a la media hora de juego, amonestado y avisado de no tener más margen. Aún así, Koeman no cambió de sistema, yendo 1-0 abajo, y situó a Frenkie De Jong, que estaba siendo el mejor en la creación, como tercer central.

Ahí el Barça se detuvo, perdió la buena inercia ofensiva que tenía y que había hecho que oliera, en varias ocasiones, el empate. Y en la segunda parte el Benfica fue mejor y marcó los dos goles que sentenciaron el choque ante un Barcelona en caída libre.