Duración: 59:40 minutos de juego.

Saques: 1 de Altuna III (tanto 4) y 3 de Salaberria (tantos 2, 6 y 10).

Faltas de saque: 1 de Altuna III.

Pasas del Cuatro y Medio: Ninguna.

Pelotazos: 233 pelotazos a buena.

Tantos en juego: 17 de Altuna III y 14 de Salaberria.

Errores: 1 de Altuna III y 3 de Salaberria.

Marcador: 1-0, 2-0, 2-2, 2-6, 5-6, 5-11, 6-15, 12-15, 12-16, 13-16, 16-16, 20-16, 20-19 y 22-19.

Botilleros: Ejercieron de botilleros Gorka Altuna (con su primo Jokin) y Ángel Salaberria (con su hijo Iker).

Apuestas: Se cantaron posturas de salida de 100 a 20 a favor de Jokin Altuna.

Incidencias: Partido correspondiente a los cuartos de final del Campeonato del Cuatro y Medio de San Fermín disputado en el frontón Atano III de Donostia. En el primer partido, Víctor-Garmendia ganaron a Arteaga II-Larunbe (18-16). En el tercero, Ezkurdia vencieron a Peio Etxeberria (22-15).

- En una sola semana, Jokin Altuna ha jugado tres partidos en tres modalidades distintas. Y ha ganado los tres. El pasado domingo se impuso en la final del Manomanista ante Beñat Rezusta por un claro 22-5, el viernes triunfó junto a Xabier Tolosa por parejas ante Urrutikoetxea-Aranguren por 22-18 y ayer sudó la gota gorda para tumbar a Iker Salaberria en los cuartos de final del Cuatro y Medio de San Fermín. Manista total. Galones de campeón.

El delantero de Amezketa, pese a sufrir en la jaula planteada en el Atano III de Donostia, impuso su categoría para levantar un 6-15 que le ponía muy cuesta arriba el triunfo frente a un adversario valiente y lenguaraz en el debate en los cuadros alegres. A Salaberria no le importan ni los focos ni quién esté delante; solamente le mueve el sabor del espectáculo y del triunfo. El goizuetarra tiene porte de puntillero y mentalidad vanguardista, pero manos de obrero. Es pelotari hasta el tuétano. El navarro tuvo contra las cuerdas al campeón del Manomanista, debatiendo a un ritmo alto y esbozando distancias con el saque-remate. Salaberria electrificó el partido y maniató a su contrincante, incapaz de quitarle el aire. En ese escenario, la técnica del joven de Goizueta hizo un roto a Altuna III. Así se escapó 2-6, 5-11 y 6-15. Fue superior en un magma de remates y pelota de plaza. Iker es un delineante buscando esquinas.

Altuna III despertó como lo hacen los dragones, con un rugido en forma de gancho. Respondió el amezketarra endureciendo el tanto y después entró en la dinámica del tercer pelotazo. El puntillero se anotó tres saque-remates de forma consecutiva y la eliminatoria comenzó a comprimirse peligrosamente. ¡Que viene! ¡Que viene!

El colorado se puso mandón: asumió que las diferencias se marcaban por la velocidad del pelotazo, pero no reprimió su espíritu funambulista. Del 6-15 al 20-16. Puro desparrame artístico. Pero Salaberria tiene algo especial: desparpajo, valentía, honestidad. De su arrojo nacieron tres tantos de bella factura. Instalado en el 20-19, de hecho, arriesgó demasiado y cometió un error que le pasó factura: del 20 iguales al 21-19. Salaberria invocó su alma de cirujano en el cara o cruz: la pelota besó la chapa y murió el duelo. Altuna III estará en la semifinal de Aspe el sábado en Sopela ante Ezkurdia.