El positivo por covid-19 de Sergio Busquets ha alterado el orden en la selección española. Encontrarse ante una situación semejante era una posibilidad en cualquiera de los 24 equipos que disputarán la Eurocopa que arranca este viernes, pero a menos de una semana de que España se estrene contra Suecia (lunes 14 a las 21.00 horas) supone un gran contratiempo. Por lo pronto, lo primordial en el seno de la concentración es descartar que haya algún otro positivo más y no alcanzar la cifra de tres, ya que en tal caso se consideraría un brote y las consecuencias serían peores. Para evitarlo, los futbolistas citados por Luis Enrique Martínez permanecen aislados y se ejercitarán, posiblemente hasta el jueves o el viernes, de manera individual. Ayer, en torno a las 11.00 horas, todos los jugadores así como los distintos miembros de la dirección deportiva y el staff de la Federación que forma parte de la comitiva española se sometieron a pruebas PCR, cuyos resultados, con pleno de negativos, se hicieron públicos poco antes de las 21.30 horas. Pese a ello, no parece la mejor manera de preparar una cita de la importancia de la Eurocopa. Un percance que ha alterado el día a día del grupo que dirige Luis Enrique, también de la prensa que sigue la actualidad del combinado español.

El domingo por la noche, mientras el futbolista se dirigía a su domicilio en un vehículo medicalizado tras conocer su positivo, que es de poca carga vírica, la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) no tardó mucho en airear su malestar con el Ministerio de Sanidad por no haber atendido a su petición de vacunar a los jugadores de cara a la cita continental, como sí está ocurriendo con los deportistas olímpicos, por ejemplo, y que sí han hecho países como Italia o Bélgica con sus futbolistas convocados para la Eurocopa.

El positivo de Busquets, sin embargo, ha hecho saltar las alertas y todo apunta a que hoy mismo se dará el visto bueno a la vacunación de los jugadores convocados por España para el torneo continental. Así lo adelantó en la tarde de ayer la cadena Cope, que explicó que el Consejo de Salud Pública que se reúne hoy aprobará la petición del Ministerio de Cultura y Deporte, que el pasado viernes envió una carta oficial a Sanidad pidiendo la vacunación de los futbolistas. En caso de que se acepte, los jugadores recibirán la vacuna de Janssen, que es monodosis.

Cuestiones extradeportivas al margen, Luis Enrique y su equipo de trabajo tuvieron que ponerse el mono de trabajo desde la misma noche del domingo y tomar decisiones de mucho calado tras conocer el positivo de Busquets. En primer lugar deben dilucidar si esperan al centrocampista, que es además del capitán de la selección española ante la ausencia de Sergio Ramos, o le sustituyen, ya que desde el pasado martes no se puede ampliar la lista de 24 a 26 jugadores, pero hasta 24 horas antes de debutar cualquier selección puede realizar diversos cambios en sus convocatorias debido a lesiones o por positivos en covid-19.

Los técnicos españoles deben decidir si aguardan para contar con un futbolista que, en principio, sería titular pero que estará al menos diez días confinado en su domicilio, sin poder entrenar con normalidad, y que por esa razón causará baja en el estreno frente a Suecia y que tampoco es seguro que una vez pasados eso diez días dé negativo en una nueva prueba de PCR. La UEFA, a diferencia de LaLiga, exige que una vez superada la cuarentena, los deportistas den negativo en un test de PCR en lugar de los dos requeridos por el ente que dirige Javier Tebas.

De momento, a la espera de que pueda haber más positivos, los responsables de la parcela deportiva del combinado estatal siguen debatiendo qué hacer con Busquets, pero por lo pronto la decisión que adoptaron ayer fue la de citar a Rodrigo Moreno (Leeds), Pablo Fornals (West Ham), Carlos Soler (Valencia), Brais Méndez (Celta) y Raúl Albiol (Villarreal), quienes pusieron fin a sus vacaciones para ejercitarse desde hoy y durante los próximos días a las órdenes de Luis Enrique; eso sí, formarán parte de una burbuja paralela a la de los primeros convocados. Así lo hizo público en la tarde de ayer la RFEF a través de una nota informativa, en la que agregó que “además, una vez finalice el partido contra Lituania -hoy, 20.45 horas-, un pequeño grupo de futbolistas aún por confirmar se incorporará a los entrenamientos de la selección absoluta en las mismas condiciones que los anteriores. Entrenarán en horarios diferentes y no se mezclarán en ningún caso con los convocados”.

Por último, la Federación Española explicó que “los jugadores invitados a los entrenamientos permanecerán fuera de la burbuja de la Ciudad del Fútbol y acudirán diariamente a Las Rozas tras haber pasado los test diarios pertinentes antes de su llegada y durante su estancia. Su incorporación definitiva a la lista de la Euro 2020 se valorará en función de los resultados obtenidos en los próximos días”. El positivo de Busquets ha alterado el plan de la selección española de cara a la Eurocopa, un contratiempo a menos de una semana de que se estrene en el torneo.

La RFEF lo considerará como disputado por la absoluta. La selección española no podrá disputar esta noche (20.45 horas) el que iba a ser su segundo y último partido de preparación de cara a la Eurocopa que arranca este viernes debido al positivo de Sergio Busquets y el aislamiento preventivo del resto de sus compañeros, por lo que será el combinado estatal sub’21 el que se mida a Lituania. Un encuentro sin demasiada historia y que se jugará por los distintos acuerdos televisivos, pero que, según aclaró ayer la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), tendrá consideración de partido disputado por la selección española absoluta. Así, un puñado de jugadores aún de categoría sub’21, entre los que no se encuentra Oihan Sancet, que sí participó en la fase final de la Eurocopa sub’21 la pasada semana, harán su debut esta noche con la selección absoluta de España que dirigirá Luis de la Fuente.