ALMERÍA Fernando; Buñuel (Balliu, min. 46), Chumi, Ivanildo, Centelles (Akieme, min.46); Morlanes, Samu Costa (min. 69); Juan Villar (Corpas, min. 46), Aketxe (Robertone, min. 46), Ramazani; y Sadiq

GIRONA Juan Carlos; Yan Couto (Aday Benítez, min. 80), Bueno, Juanpe, Arnau, Franquesa (Luna, min.80); Gumbau (Ibrahima Kebe, min. 46), Cristóforo (Terrats, min. 53), Manchu; Bárcenas (Bustos, min. 67)

Árbitro Ortiz Arias, del colegio madrileño. Tarjeta amarilla a Ivanildo (min. 35), Buñuel (min. 41), Robertone (min. 51) y Samu Costa (min. 55) del Almería; y a Ibrahima Kebe (min. 66) y Terrats (min. 87), del Girona

Estadio Juegos Mediterráneos (Almería) ante 1.500 espectadores

- El Girona pasó sin sobresaltos a la final de la promoción de ascenso a LaLiga Santander tras no presentar siquiera el Almería su candidatura a la remontada, teniéndose que conformar con una igualada sin goles estéril por el 3-0 de la ida.

El cuadro gerundense incluso realizó más méritos que los de Rubi para haberse llevado este encuentro de vuelta y, tras solventar el trámite, se medirá el próximo fin de semana al Rayo si el Leganés no da la sorpresa hoy.

Todo ello con 1.500 espectadores, que volvieron al Estadio de los Juegos Mediterráneos 455 días después para observar un quiero y no puedo de su equipo, que vuelve a quedar apeado del ascenso en la semifinal por segunda temporada consecutiva. Al igual que el pasado año, el Girona fue muy superior durante la eliminatoria desde su comienzo hasta su fin.

Rubi movió hasta siete piezas respecto al once de ida, repitiendo sólo Chumi, Morlanes, Ramazani y Sadiq, sin tener efecto la revolución. Francisco, por su parte, no reservó a nadie para la final y repitió alineación, viéndose un Girona bastante completo tanto en ataque como en defensa.

Los visitantes salieron en plan dominador. Francisco ordenó una alta presión muy agresiva, metiendo al Almería en apuros, sin saber cómo salir triunfador de la zona de iniciación. El Almería intentó activarse teniendo el balón y buscando Ramazani, Sadiq y Juan Villar la espalda de la zaga gerundense, de sobresaliente hoy. Fue un oasis en el desierto. Los de Rubi no terminaban de creérselo y cuando lo intentaban se toparon con el buen sistema defensivo de los visitantes.