- Darío Gómez (Ezcaray, 1996) empieza el sábado su segunda cita con el Manomanista de Primera. En 2020 llegó a las semifinales y puso las cosas muy difíciles a Jokin Altuna, que ganó 22-15. El riojano busca repetir el hito ante Zabaleta en Donostia.

¿Cómo llega a su primer partido del Manomanista?

—Estoy muy ilusionado. He preparado con mucho mimo este campeonato. Es el objetivo principal desde hace meses. Te lo juegas todo a una carta, pero tengo ganas de que llegue el sábado para enfrentarme a Zabaleta.

En el mano a mano no existe opción de fallo. ¿Le motivan este tipo de compromisos?

—Es para lo que nos preparamos. En 2020 fui día a día y las cosas me salieron bien. Hay que reconocer que este año los rivales llegan más rodados, pero también estoy con muchas ganas. Quiero demostrar que puedo dar guerra y estoy motivado.

En la edición de 2020, a la que accedió como campeón de Promoción y tras superar una previa ante Peio Etxeberria (22-15), fue la revelación. ¿La intención es que este año sea su confirmación?

—Mi principal objetivo es disfrutar como lo hice el año pasado. Fue un mes muy bonito. Las cosas salieron muy bien. Mi meta es salir a darlo todo y demostrar todo lo que he entrenado. Si gano, además, sería perfecto.

¿Cree que hay más presión sobre usted al actuar esta campaña como cabeza de serie?

—No. Mucho menos después de ver cómo jugó Zabaleta el sábado ante Arteaga II -ganó 22-2-. Los compañeros me han comentado que está entrenando a gran nivel, está sacando a pelotazos a todos. Saldré a la cancha a hacerlo lo mejor posible, a complicarle y moverle. Además, Zabaleta no es solo pegada: tiene movilidad, la dejada le funciona bien y saca mucho, quizás el que mejor de todos. Será complicado, pero me he entrenado y preparado para algo.

Es un delantero largo. ¿Será un partido más clásico?

—El material no da muchas opciones para ponerse a bote y jugar al peloteo. Además, contra Zabaleta, si te pones de tú a tú, ni los mejores zagueros son capaces de aguantarle, como para ponerme yo en el ocho o el nueve a pelotear. Mi intención es sacarle del ritmo, que no juegue cómodo.

Comentaba que Zabaleta quizás es el que mejor saca. ¿Le sorprende en ese aspecto?

—No he coincidido entrenando mano a mano con él, pero sí que me habían comentado mis compañeros que estaba sacando como un tiro. Con el gas que le da la pelota, a nada que bote bien, le sale rapidísimo. Además, le da dirección. Es otra de sus armas.

¿Cómo han sido los entrenamientos específicos del mano a mano?

—He tenido tiempo para prepararlo, pero al final he ido jugando semana a semana y no he tenido las manos muy sobradas hasta hace poco. He hecho ensayos con Jokin Etxaniz, con Xabier Erostarbe y por mi cuenta.

Le ha tocado ser suplente en el Parejas de Promoción. En principio, no se planteaba un invierno con muchas oportunidades para usted. ¿Cómo lo ha vivido?

—Sabía que podía ser un invierno complicado, pero, al no haber plantillas muy extensas, he tenido que jugar prácticamente todas las semanas. He tenido continuidad y las lesiones me han respetado.

Tras alcanzar las semifinales del Manomanista no ha tenido opciones en Primera. En un año normal podría haber tenido un verano con estelares. ¿Ha pensado en ello?

—La verdad es que no. Pienso en hacerlo lo mejor posible para seguir disfrutando de la pelota. Ese es mi objetivo. De nada sirve dar vueltas a lo pasado. Tengo que sacar lo positivo de cada una de mis experiencias. Tengo la suerte de haber vivido de todo tipo y he sacado lo mejor de cada una de ellas. Hay que intentar relativizar. Por suerte, estoy estudiando fisioterapia y no tengo la cabeza solo en el deporte, por lo que he podido llevar mucho mejor las cosas negativas. Ahora me están saliendo mejor las cosas. Intento disfrutar y pulir mis defectos día a día.

“El material no da muchas opciones para jugar a bote y contra Zabaleta ni los mejores zagueros pueden aguantarle”

“No creo que este año haya más presión sobre mí. Mucho menos después de ver cómo está José Javier”

“Sabía que podía haber sido un invierno complicado, pero he tenido que jugar casi todas las semanas”