- Cuando Rafa Nadal salta a una cancha no está para fiestas y ayer se lo dejó claro a Carlos Alcaraz en el esperado duelo generacional que acabó con una contundente victoria del balear 6-1 y 6-2 en 77 minutos. Tras el partido, Feliciano López, director del Mutua Madrid Open, obsequió con una tarta al murciano por su 18 cumpleaños y el ídolo del chaval, que pese a todo lució una gran sonrisa, se sumó a la celebración. Antes, Nadal le había regalado su primera lección en vivo. Alcaraz sufrió en directo aquello que había visto tantas veces por la televisión y descubrió que ese es el camino a seguir si quiere convertirse en un jugador de la élite mundial.

"Le deseo lo mejor a Carlos, tiene las cosas claras y valores que la sociedad necesita. Para mí más importante que cualquier éxito es ser buena persona. Cuando tienes valores las etapas se cubren a una mayor velocidad. Lo tiene todo para ser un gran jugador y lo único que necesita es tiempo. Espero que mantenga las ganas de trabajar y la ilusión porque le necesitamos", comentó Nadal tras un partido impecable por su parte y que al joven murciano se le hizo grande, como era lógico. El número 2 del mundo, con la confianza restañada en Barcelona, apretó desde el principio y Alcaraz, nervioso y atenazado, no pudo sacar sus virtudes, atropellado por el peso de la bola del tenista de Manacor. En el tercer juego, tras un largo intercambio, acusó problemas en la parte alta del abdomen, quizás donde se le concentró la tensión de un día histórico para él.

Nadal puso muy alto el listón y apenas bajó el ritmo más que para consentir tres juegos a su rival. En el cuarto juego del segundo set, cedió su saque por única vez, pero respondió con una contrarrotura en blanco, aunque Alcaraz, al menos, pudo alargar el partido algunos minutos más. El jugador de El Palmar admitió que pagó la novatada: "Me ha podido la ansiedad, quería cerrar el punto demasiado pronto y Rafa es Rafa. A veces me olvidaba de que estaba jugando contra él y que la pelota volvía y volvía. Jugar contra él no es fácil, ni la primera ni la cien". Aunque salió convencido de que "la próxima vez será totalmente diferente. Pero esta oportunidad la he disfrutado muchísimo".

Nadal se medirá hoy en la tercera ronda a otro joven, Alexei Popyrin, que dio la sorpresa en otro duelo de juventud ante Jannick Sinner, finalista en Miami. El australiano de 21 años llega de la previa y tiene un servicio poderoso, pero no debería dar problemas si el balear está en su mejor versión. "El abc que tenía que recuperar está recuperado", asegura.

En el torneo femenino, Paula Badosa está llevando una trayectoria impecable y ya está en semifinales tras imponerse a Belinda Bencic por 6-4 y 7-5. Ahí se medirá a la australiana Ashleigh Barty, la número 1 del mundo que acumula quince victorias consecutivas en tierra y ayer venció a Petra Kvitova, triple campeona del torneo. Su última derrota fue, precisamente, ante la gerundense en el torneo de Charleston. La otra semifinal enfrentará a la rusa Anastasia Pavlyuchenkova y la bielorrusa Aryna Sabalenka.