- El Día D de la Itzulia será el más corto, apenas 119 kilómetros, pero probablemente sea el más intenso, epidérmico, loco, trascendente y recordado. De la travesía sobre el filo de una perfil de mordedura tiburón blanco, saldrá el campeón de la Itzulia. Entre Ondarroa y Arrate se inscribirá el palmarés de la carrera, magnífica su salud en su 60ª edición. Una etapa exprés, de mecha corta, repleta de pólvora, con siete puertos puntuables: tres de Primera, uno de Segunda y tres de Tercera, servirá para conocer al campeón de la Itzulia. Brandon McNulty, la cara B de Tadej Pogacar, alcanza la cita definitiva con una renta de apenas 23 segundos sobre Primoz Roglic. Vingegaard, escudero de Roglic, es tercero, a 28 segundos del estadounidense. Pello Bilbao es cuarto a 36 segundos. Pogacar, el líder del UAE y principal rival de Roglic, está un peldaño más abajo, a 43 segundos de su camarada. A partir del prodigio esloveno, el resto de opositores al triunfo final se encuentran a más de un minuto de McNulty. Yates, Buchmann, Valverde, Izagirre y Landa vigilan al líder a una distancia aún asumible para emprender una revolución.

El recorrido otorga la opción de voltearlo todo. Ion Izagirre, campeón de la última edición de la Itzulia, la que se celebró en 2019, sabe que esa posibilidad existe y es real, que en la última etapa “puede pasar cualquier cosa. Se saldrá rápido, a tope, con el cuchillo entre los dientes. Habrá muchos ataques. Es imposible que un equipo la controle”. El de Ormaiztegi derrocó del trono a Buchmann con un ofensiva total promovida por el Astana. Con Arribinieta (3ª; km.5) y Elkorrieta (3ª; km.12), Azurki (1a; km.24; 5,4 kms. al 7% de desnivel medio y rampas de hasta el 16); Elosua (2a; km.44) y las dos ascensiones a Arrate, la primera por Krabelin (1ª; km.69; 5 kms. al 9,6 y tramos al 17) y la segunda, después de Trabakua (3ª; km.90), por Usartza (4,5 al 8,8 y puntos al 13), con la cima a poco más de dos kilómetros y medio de meta, incrustados en el recorrido, cualquier escenario es posible. El trazado no concede descanso en sus 3.500 metros de desnivel. No habrá respiro. Será una etapa en apnea. Una montaña rusa.

En ese ecosistema, con un trazado tan escaso de kilometraje, se espera una salida de alto voltaje. Rompe y rasga. A partir de ese fotograma, las variables son demasiadas. La estrategia se percibe como un factor diferencial ante el apelotonamiento de ciclistas con posibilidades de descorchar la victoria final en Arrate. En principio, Roglic y Pogacar, los dos más fuertes de la Itzulia libra por libra, están obligados a remontar. Pogacar está aliado con el líder, McNulty, y Roglic cuenta con Vingegaard como pieza para manejar. UAE y Jumbo disponen de dos bazas. “Lo daré todo para ganar la Itzulia, pero tendremos que tener una buena estrategia en un día en el que se irá a tope”, expresó Roglic ante la jornada que sentenciará la carrera vasca. McNulty entiende que la rueda a seguir es la de Roglic, pero sabe que no le basta con rastrearla. “Haré todo lo que pueda para ganar”, dijo el líder, “algo nervioso”, antes de una jornada en la que se espera lluvia, una dificultad más. “Espero que podamos defender el maillot amarillo. Particularmente me siento con confianza y estoy muy bien. Creo que podremos defendernos de los ataques”, subrayó Pogacar. En caso de que no pudieran hacerlo, el esloveno sostuvo que “tendremos que improvisar”.

En una etapa que cuenta con todos los elementos para saltar por los aires desde el amanecer, los actores secundarios pueden ocupar el centro de la escena. Nadie esperará al final. Jugársela en la subida definitiva a Arrate es un viaje a la nada. La carrera deberá, por tanto, agitarse desde el arranque. Ese argumento prevalece. El Astana, un equipo repleto de artilleros, no lo dudará y lo apostará todo por Izagirre. En Bahrain, donde Pello Bilbao es cuarto y Mikel Landa, décimo, manejarán la idea de provocar un incendio. “A ver qué pasa en Arrate. Mikel Landa tiene buenas piernas, estamos todos con las ganas intactas y queremos entrar en juego, hacer una etapa agresiva”, expuso Pello Bilbao. Ese mismo argumento sostendrá la ambición del Bora con Buchmann o del Ineos con Adam Yates. Asalto final al santuario de Arrate.

Quinta etapa

Jon Aberasturi

Ion Izagirre

Mikel Landa

Pello Bilbao

Mikel Aristi(Euskaltel-Euskadi)

Jonathan Lastra

Urko Berrade

Jon Agirre

Gotzon Martin (Euskaltel-Euskadi)

Mikel Nieve

Jon Barrenetxea

Omar Fraile

Unai Cuadrado (Euskaltel-Euskadi)

Óscar Rodríguez

Alex Aranburu

Mikel Iturria (Euskaltel-Euskadi)

Txomin Juaristi (Euskaltel-Euskadi)

Ander Okamika

Oier Lazkano

Jon Irisarri

General

Pello Bilbao

Ion Izagirre Insausti

Mikel Landa

Jonathan Lastra

Alex Aranburu

Mikel Nieve

Jon Agirre

Gotzon Martín (Euskaltel)

Omar Fraile

Unai Cuadrado (Euskaltel)

Txomin Juaristi (Euskaltel)

Jon Barrenetxea

Urko Berrade

Óscar Rodríguez

Ander Okamika

Mikel Iturria (Euskaltel)

Jon Aberasturi

Mikel Aristi (Euskaltel)

Oier Lazkano

Jon Irisarri