- Garbiñe Muguruza se quedó en la cuarta ronda del Abierto de Australia después de que Naomi Osaka levantara dos bolas de partido en su contra (4-6, 6-4 y 7-5). El partido había sido considerado por muchos como una final anticipada y respondió a las expectativas porque ambas jugadoras, que siempre quieren llevar la iniciativa, ofrecieron un nivel altísimo. El resultado pudo ser otro, apenas un par de bolas decidieron que la japonesa, que acumula 18 victorias consecutivas en la superficie en la que mejor rinde de largo, siga su camino hacia su cuarto Grand Slam y segundo en Melbourne.

La de Caracas logró contener e, incluso, desesperar a su rival, que firmó medias de primer servicio cercanas a los 200 km/h. Tras empezar con un 0-2 en contra, Muguruza encontró su ritmo y logró responder a los poderosos tiros de Osaka hasta anotarse el primer parcial. Después, dispuso de un 2-0 a su favor, pero la campeona de 2019, que firmó 44 golpes ganadores, elevó su agresividad por los dos lados e igualó el partido. En el tercer set, no hubo tregua, Muguruza estuvo espléndida por momentos, pero le faltó rematar y no por culpa suya. Con 5-3 y 15-40, Osaka hizo un saque directo. Y en el segundo match-ball, la vasco-venezolana quiso sujetar el punto, pero su rival encontró los ángulos y provocó el error. Salvado el apuro, otro saque directo y un golpe ganador dieron el juego a la tenista nipona, que recobrada la calma, en adelante no cometió ni un error y desbordó en los tres últimos juegos a Muguruza, tocada moralmente porque había dejado pasar una gran oportunidad. "Estoy dolida porque he tenido la victoria muy cerca, pero creo que he competido muy bien y me quedo muy contenta con el rendimiento que he dado estas semanas en Australia", resumió la finalista del año pasado.

Naomi Osaka se verá en cuartos de final con la taiwanesa Su-Wei Hsieh, que con su tenis a dos manos y 35 años ha llegado más lejos que nunca. El otro duelo por este lado del cuadro medirá a Simona Halep, que eliminó a Iga Swiatek, la última campeona de Roland Garros, con Serena Williams, que dejó fuera a la aún promesa Aryna Sabalenka y persigue con 39 años su sueño del 24º Grand Slam.

En el torneo masculino, Novak Djokovic sigue su defensa del título tras vencer en cuatro sets a Milos Raonic, pese a sus problemas físicos. "Si no fuera un Grand Slam ya me habría retirado", aseguró el serbio, que se medirá en cuartos a Alexander Zverev. Completa esta llave del cuadro el duelo sorpresa. El revivido Grigor Dimitrov destrozó a Dominic Thiem, finalista en 2020, en apenas dos horas para citarse con el ruso Aslan Karatsev, 114º del mundo que debuta en un grande y ha llegado a cuartos tras remontar y vencer en cinco sets a Auger-Alliasime.