ESPAÑA Pérez de Vargas; Solé (3, 1p), Raúl Entrerríos, Morros, Alex Dujshebaev (4), Cañellas y Ariño (2) -equipo inicial-, Corrales (ps), Aleix Gómez (3, 1p), Maqueda (5), Sarmiento, Dani Dujshebaev (7), Ángel Fernández, Figueras (6), Gedeón Guardiola y Marchán (3).

DINAMARCA Svan (3), Gidsel (4), Saugstrup (7), Olsen (4), Hald (1), Mikkel Hansen (12, 2p) y Magnus Landin (2) -equipo inicial-, Niklas Landin y Moller (ps); Emil Jakobsen (1), Zachariassen, Mollgaard, Mensah Larsen, Andersson (1), Oris, Holm, Christensen y Benjamin Jakobsen.

Marcador cada 5 minutos 2-4, 5-7, 7-10, 10-13, 14-16 y 16-18; 19-22, 22-25, 24-26, 28-30, 31-33 y 33-35.

Árbitros Horacek y Novotny (República Checa). Expulsaron por tres exclusiones a Henrik Mollgaard (m.40). Además, excluyeron por dos minutos a Figueras, Guardiola y Raúl Entrerríos por España; y a Gidsel por Dinamarca.

Pabellón Cairo Stadium Hall. Sin público.

- La selección española se tendrá que conformar con pelear por el bronce en el Mundial de Egipto tras caer ayer por 33-35 ante Dinamarca en un encuentro en el que los Hispanos nunca encontraron la manera de contener en defensa al conjunto nórdico. Una circunstancia que no impidió al equipo español llegar al último minuto de juego con la posibilidad de forzar la prórroga, pero el lanzamiento del pivote Rubén Marchán botó fuera de la línea tras tocar en el larguero.

Triste final para una selección que perdió en defensa ante las diferentes variantes tácticas que desplegó el conjunto danés, especialmente cuando apostó por atacar con siete jugadores de campo. Una fórmula que Dinamarca acostumbra a usar, pero nunca, como ayer, desde el primer segundo del partido. Una arriesgada apuesta que no pudo salir mejor al conjunto escandinavo, que solventó sus primeros ocho ataques con gol.

Todo un problema para los de Jordi Ribera, no sólo ya por la rápida ventaja de dos goles (1-3) que adquirió Dinamarca, sino porque impidió coger ritmo a la portería y a la defensa española, los dos pilares sobre los que se han sustentado los éxitos de los Hispanos.

Sin el respaldo de su defensa, el conjunto español se vio exigido al máximo en cada uno de sus ataques, una circunstancia que si bien de partida solventó con los latigazos de Alex Dujshebaev, no tardó en costar caro al equipo español.

Y es que en el momento en el que España bajo el porcentaje de acierto en sus lanzamientos, Dinamarca se disparó en el marcador con una ventaja máxima de 5 tantos (8-13). Los Hispanos fueron a remolque todo el primer tiempo y solo al final lograron cerrar un poco los espacios en defensa hasta conseguir frenar, por fin, el ataque danés, para irse al descanso a tan sólo 2 goles (14-16). La segunda parte no pudo comenzar peor: dos pérdidas consecutivas que los daneses no desaprovecharon para doblar a la contra su ventaja en el marcador (16-20).

Un auténtico Everest para el equipo español, que nunca pareció encontrar el camino para resolver los continuos problemas que le causaba el ataque danés. Y es que por cada gol de Maqueda o de Dani Dujshebaev, de largo el más acertado del conjunto español, Dinamarca respondía con otro tanto, haciendo imposible cualquier atisbo de remontada. España necesitaba un revulsivo y pareció encontrarlo en la expulsión por tres exclusiones del danés Mollgaard. Las distancias se acortaron y durante varios minutos la ventaja danesa osciló entre 1 y 2 goles.

Al último minuto de juego, los Hispanos entraban con 33-34 y balón en su poder. Sin embargo, el lanzamiento de Marchán botó sobre la línea tras tocar en el larguero, condenando a España a un derrota, con gol final de Lasse Svan (33-35), que condenó a la selección a pelear mañana (14.30) por la medalla de bronce ante Francia.