ALCOYANO José Juan, Jordán (Alberto Rubio, m.80), Primi, Raúl González, Pablo Carbonell, Jorge Moltó (Raillo, m.46), Jony (Diakaté, m.58), Juanan, Ángel, Mourad (Jona, m.66) y Juli (Solves, m.58).

ATHLETIC Ezkieta; Lekue, Núñez, Yeray, Yuri; Berenguer (Dani García, m.66), Vesga, Unai López (Williams, m.66), Morcillo (Muniain, m.46), Villalibre (Capa, m.82) y Sancet (Raúl García, m.46).

Goles 1-0: m.39: Pablo Carbonell. 1-1, m.53: Villalibre. 1-2, m.78: Williams.

Árbitro Medié Jiménez (comité catalán). Amonestó por el Alcoyano a Jony, Diakaté y Ángel López y por el Athletic a Vesga.

Estadio El Collao sin espectadores.

- Un Athletic superior alcanzó los cuartos de final de la Copa del Rey en un partido en el que los tantos marcados por Asier Villalibre e Iñaki Williams permitieron que el equipo remontara en la segunda mitad el 1-0 adverso con el que el encuentro llegó a su ecuador y pusieron fin al sueño copero del Alcoyano en esta temporada. El partido comenzó con un balón al palo del equipo local lanzado por Ángel López, tras el que el Athletic pasó a controlar el partido tanto territorialmente como en aproximaciones a la meta de José Juan.

Sin embargo, el equipo de Marcelino García Toral no conseguía que sus llegadas fueran acompañadas de peligro y la portería del conjunto alicantino no pasó por situaciones de verdadero apuro puesto que su defensa, bien posicionada, no daba opciones al ataque de rival. A esa superioridad posicional del Athletic, el Alcoyano daba réplica con un fútbol muy directo para encontrar la potencia de Mourad en los balones aéreos y tratar de aprovechar alguna de las pocas ocasiones que se le pudieran presentar. La insistencia del Athletic no daba fruto, mientras que las llegadas del Alcoyano no generaban excesivo peligro, pero sí una cierta intranquilidad en la parcela del equipo vasco. Un derribo sobre Jordán cerca del área propició el 1-0, marcado de falta directa con la zurda por Carbonell y que llevó al descanso un encuentro que se había jugado más como quería el conjunto de Vicente Parras que como deseaba el Athletic. Para revertir la dinámica del encuentro, Marcelino no esperó más allá del descanso. Dio entrada a dos de los pesos pesados de su plantilla, Muniain y Raúl García.