- La situación sanitaria de Euskadi y las nuevas medidas adoptadas por el Gobierno vasco para frenar el avance del covid-19 chocan de frente con las necesidades de la Liga de Empresas de Pelota a Mano profesional a la hora de realizar sus eventos deportivos. Para empezar, siendo uno de los pocos deportes que cuenta con público, Aspe y Baiko Pilota se vieron obligados desde la semana pasada a rebajar el aforo máximo de sus eventos al 50% de los frontones, con un máximo de 400 espectadores. A este hecho se suma las restricciones a la movilidad entre municipios y la instauración del toque de queda desde las 23.00 horas hasta las 6.00.

Desde las promotoras se afirma que “es un golpe fuerte”. “Tenemos que empezar a pensar cómo vamos a encajar los partidos de los viernes, ya que debemos adaptarlos a la nueva realidad sanitaria”, describen. Y es que lo habitual era que los festivales de dos partidos comenzaran a las 21.15 horas, por lo que sería totalmente imposible cumplir con los horarios marcados por las autoridades. De este modo, las promotoras comienzan a valorar “qué pasos dar”, pues las emisiones de sábados y domingos no quedarán trastocadas al estar ubicadas en la franja de media tarde.

La cuestión más preocupante es la de la venta de entradas. “Ya es complicado meter a 400 personas en un frontón en la coyuntura actual, pero ahora se dificulta aún más, debido a las restricciones a la movilidad, pues todos deben ser del mismo municipio. Es un golpe fuerte”, finalizan.

Por otro lado, el desbloqueo de la situación en Baiko facilitará la confección del Manomanista. Si bien se paralizó su inicio durante una semana, el plan inicial es que se anuncie su comienzo para la semana próxima; es decir, el 6 de noviembre.

“Es complicado meter a 400 personas en un frontón en la coyuntura actual, pero ahora se dificulta aún más con las restricciones”