vitoria - No habrá partido de Euroliga hoy en el Buesa Arena. El Zenit de San Petesburgo, asediado por el coronavirus, ni siquiera ha viajado a Vitoria. Se ha abierto un procedimiento que será evaluado por el Juez Disciplinario, quien tomará una decisión en base al reglamento especial de la Euroliga a consecuencia del covid-19. Además, hoy mismo el club comunicará a los abonados que tenían ya reservada su localidad para este partido cuál será el procedimiento a seguir.

El club ruso, que cuenta sus partidos en esta Euroliga por victorias (2-0), se encuentra en cuarentena y ha pedido a la Euroliga el aplazamiento tanto de su partido en Vitoria como el que tenía que jugar el jueves ante el Valencia Basket.

El Zenit ha notificado 13 positivos por covid-19: ocho jugadores, cuatro entrenadores, incluido Xavi Pascual, y un masajista. Del cuerpo técnico también habrían resultado contagiados sus ayudantes Íñigo Zorzano, Voznyuk y Yalovchuk. Entre los jugadores Billy Baron, Kevin Pangos, Mateusz Ponitka e Igor Volkhin fueron los últimos en unirse a una lista en la que ya estaban Arturas Gudaitis, Vladislav Trushkin, Austin Hollins y Anton Pushkov, que ya no jugaron la semana pasada ante el Barça.

El Zenit sólo tiene seis jugadores de la primera plantilla disponibles para esta semana: Fridzon, Poythress, Thomas, Rivers, Zakharov y Zubkov. "En vista de la situación actual, los entrenamientos del equipo han quedado suspendidos para evitar una mayor propagación del virus. Todos los entrenadores y jugadores están aislados y controlados por el personal médico", anunció el Zenit en un comunicado.

Por supuesto, también se suspendió el viaje a Vitoria así como la reserva de hotel. El equipo ruso trató de que la Euroliga aplazase los dos partidos, y de momento no se van a disputar esta semana, pero el reglamento de la competición establece que si un equipo no tiene jugadores para afrontar un partido lo pierde 0-20 como ya le ocurrió esta semana al Olimpia Lubliana en la Eurocup.

Lo cierto es que la disputa de la Euroliga corre peligro, tal y como sucedió la pasada temporada en la que la competición debió ser suspendida por la pandemia. Los casos positivos van golpeando a distintas plantillas como la ya comentada del Zenit y también la del Khimki, próximo rival del Baskonia el viernes también en el Buesa Arena.

El conjunto entrenado por el mítico Rimas Kurtinaitis ya se vio obligado a aplazar un día su compromiso con el Zalgiris debido a media docena de bajas relacionadas con el coronavirus. Greg Monroe, el ex baskonista Janis Timma, Evgeny Voronov, Maxim Barashkov y Jordan Mickey, por positivo en coronavirus, así como el norteamericano Errick McCollum, en cuarentena tras su llegada al país. El partido se jugó el sábado aunque el Zalgiris tenía demasiada ventaja y acabó imponíendose por 14 puntos de diferencia (70-84).

Sin embargo, la idea del Khimki a día de hoy es viajar a Vitoria para disputar el partido el viernes si bien tendrá que rellenar. De todos modos, aún hay que esperar a que se acerque la fecha para comprobar si la pandemia remite o si hay que aplazar o suspender el partido.

En el Baskonia esperan acontecimientos hasta conocer la decisión definitiva de la Euroliga. El precedente del Olimpia Lubliana invita a pensar en un triunfo por incomparecencia pero también cabe la posibilidad de buscar alguna alternativa para no destrozar el torneo.

El equipo se entrenó ayer con normalidad a las órdenes de Ivanovic si bien el objetivo ya no era tanto preparar este partido como recuperar sensaciones positivas después de las últimas derrotas.