KUTXABANK ARASKI Izaskun García (3), María Asurmendi (15), Laura Quevedo (15), Tamara Seda (11), Tamara Abalde (11) - quinteto inicial -, Cristina Molinuevo, Laura Pardo (), Anna Cruz (8), Tania Pérez y Joy Alexis Brown (5).

QUESOS EL PASTOR C. D. ZAMARAT Marina Lizarazu (5), Marta Montoliu (8), Valeriya Berezhynska (12), Abigail Wolf (12), Brooke Wylie (5) - quinteto inicial -, Ana Carlota Faussurier, Amy Nnenna Okonkwo (18), Klaudia Perisa, Alejandra Quirante (3), Romina Isabel Rodríguez y Helga Sarah.

Parciales 24- 23, 11-18, (35- 41 descanso), 13 - 9, 20 - 13 (68-63 final).

Árbitros Pere Munar Bañon, Juan Manuel Uruñuela y Alejandro Aranzana García.

Pabellón Polideportivo Mendizorrotza ante 480 espectadores.

- El Araski Kutxabank logró ayer una trabajada victoria por 68 a 63 ante el Quesos el Pastor en una tarde donde el aficionado volvió a disfrutar del baloncesto. La emoción ha vuelto de forma definitiva a Mendizorrotza, y es que quizá no se esté viendo el mejor baloncesto, pero al Araski jamás se le podrá negar que lo da todo sobre la cancha. Las vitorianas no tuvieron su mejor tarde de cara al aro, pero gracias al carácter mostrado se logró una victoria que vale su peso en oro.

El encuentro comenzó con un retraso de 20 minutos a causa de un fallo técnico con las estadísticas. Aún así, no se frenó el ímpetu local, y es que el partido comenzó como terminó el anterior de la semana pasada, con una María Asurmendi estelar, anotando desde la línea de tres y asistiendo. El Araski volvió a comenzar con mucha energía y con una defensa intensa para luego intentar correr. La fórmula enseguida le dio resultado para abrir una pequeña brecha en el marcador con un 12 a 4 en los primeros cuatro minutos de juego. Sin embargo, esa intensidad se diluyó bastante rápido para dar paso a las imprecisiones.

El rebote defensivo penalizaba a las vitorianas, que no eran capaces de cerrarlo y esto daba vida a las de Ángel Fernández para recortar distancias. Las locales intentaban jugar por dentro, su gran tarea pendiente hasta la fecha, pero no había manera de mirar al aro. Sin embargo y una vez más, ahí estaban Asurmendi y Quevedo para anotar desde la distancia. La recta final de los primeros diez minutos fue un cúmulo de errores y precipitaciones por parte de ambos conjuntos, y en ese caos apareció Okonkwo con dos triples consecutivos y así igualar el marcador. El cierre del primer periodo dejó la delicia de un triple sobre la bocina desde el medio campo de la jugadora Alejandra Quirante para dejar el 24 a 23 en el luminoso.

El comienzo de este segundo periodo sirvió para que el Zamarat se pusiera por delante en el marcador por primera vez en el encuentro y fue gracias al rebote ofensivo, uno más, de Wolf. Las vitorianas ahora no se encontraban y cometían varios fallos que fueron aprovechados por las de Ángel Fernández, en especial, por la pívot estadounidense, quien continuó haciendo mucho daño en la zona con varias canasta seguidas. La entrenadora vitoriana, Madelén Urieta tuvo que parar el partido con un tiempo muerto, pero el descanso no pareció despertar a sus pupilas. Sin embargo, en ese momento de incertidumbre apareció, como siempre, Asurmendi con un triple para cortar la racha negativa y dar algo de vida a las suyas.

Al final, Made consiguió dar con la tecla y planteó una defensa en zona para frenar la anotación visitante y cerrar mejor el rebote defensivo. Aún así, las vitorianas no se encontraban cómodas en ataque y no lograban anotar, en parte, por la intensa defensa que estaban planteando las de Ángel Fernández. Los últimos minutos del cuarto fueron una sequía de puntos para ambos conjuntos y se llegó al ecuador con un 35 a 41 y todo por decidir.

El Kutxabank Araski volvió con más energía del descanso y subió la dureza defensiva para intentar parar a las pívots del Zamarat, mientras que en ataque tenían más paciencia, y poco a poco fueron recortando distancias en el marcador hasta colocarse a dos puntos. A Ángel Fernández no le gustaba lo que veía sobre la cancha y enseguida paró el encuentro en busca de una reacción de las suyas. El Araski tuvo varias ocasiones para volver a darle la vuelta al marcador, pero el balón parecía que no quería entrar. Ese desacierto lo aprovechó Okonkwo para hacer un dos más uno y sacarle la cuarta falta a Tamara Seda. Al final, irrumpió Abalde con un triple para igualar el encuentro y despertar a los cerca de 500 aficionados que se acercaron a Mendizorrotza. La propia jugadora fue la encargada de poner a las suyas por delante, aunque fuera por un punto, gracias al tiro libre. El encuentro estaba abierto y aún faltaban 3 minutos para finalizar el tercer periodo. La conexión equipo y afición ya estaba otra vez con el interruptor de encendido y las jugadoras lo notaron para defender con gran intensidad y conseguir que las visitantes no lograran ni tirar a canasta en varios ataques. A pesar del buen hacer defensivo, las de Made seguían fallando en ataque.

El tercer cuarto y el último periodo terminaban y empezaban de la misma manera, con Okonkwo anotando y poniendo a su equipo con una pequeña renta de cuatro puntos. La sequía de puntos parecía haberse acabado y Abalde y Quevedo volvían a darle la vuelta al marcador. El encuentro estaba abierto y daba la sensación de que cualquiera podía llevarse la victoria cuando tan solo faltaban cinco minutos para la conclusión. Cada canasta valía oro y costaba mucho ver aro. Izaskun García levantaba a los aficionados con un gran triple que enseguida contestaban las visitantes con dos canastas de Wolf y Lizarazu respectivamente. El balón seguía sin entrar, y eso que el Araski encontraba buenos tiros, pero ni siquiera recogiendo varios rebotes ofensivos se lograba anotar. Entonces apareció Anna Cruz desde la esquina con un triple prácticamente decisivo al poner un 66 a 60 cuando el encuentro entraba en su último minuto. Al final victoria para el Araski que tiró de garra y corazón para lograr la segunda consecutiva.