- El Tour de Francia llegará mañana a Lyon. La localidad francesa será la meta de la décimo cuarta etapa y la salida de la décimo quinta jornada de la ronda gala. Sin embargo, todo parece indicar que la Grande Boucle no tendrá una estancia tranquila en dicha ciudad porque a la fiesta ciclista le ha salido un digno detractor: Grégory Doucet, el alcalde de Lyon. El primer edil, que fue el ganador en las recientes elecciones municipales, se mostró muy crítico con el paso del pelotón por su localidad, dejando claro que la presencia del Tour en sus dominios es una indeseada herencia de su predecesor. De hecho, Doucet calificó la prueba francesa como "machista y contaminante" y prometió que el maillot amarillo no volverá a pugnarse en Lyon durante su mandato. "Hay varios aspectos que me molestan. Lo primero es que el Tour sigue mostrando una imagen machista del deporte. Cuando defendemos los valores del deporte, defendemos la igualdad de género. Desde hace mucho debería haber un Tour de Francia femenino, y el Tour ha sido el último en dar el paso", argumentó en el diario Le Progrès

El dirigente del partido de Los Verdes criticó el daño medioambiental que la carrera provoca allá por donde pasa, explicando que los beneficios económicos que produce el Tour no compensa el deterioro del ecosistema que provoca: "¿Cuántos vehículos a motor circulan para que los ciclistas rueden en bicicleta? ¿Cuántos residuos genera? Todas las cosas que se arrojan al paso de la caravana deben repensarse. El Tour además le cuesta 600.000 euros a Lyon. El ayuntamiento volverá a acoger la carrera cuando demuestre que puede evolucionar", concluyó Doucet. Con todo, al Tour todavía le queda una jornada para rodar hacia Lyon y será bastante agotadora. Y es que la décimo tercera etapa de esta Grande Boucle será la despedida del Macizo Central, una sucesión de puertos con más de 4.000 metros verticales, con bonificación a 11 kilómetros de la meta y con un final al 8%. Por ello, Primoz Roglic, que mantiene el amarillo a 21 segundos de Egan Bernal reconoció que la etapa de ayer fue "un mero calentamiento" para lo que llegará esta tarde: "Una etapa aún más dura y, por tanto, un nuevo desafío. Ojalá podamos seguir compitiendo así".

Clavícula derecha rota y el tercer metacarpiano. Ion Izagirre, que tuvo que abandonar el Tour el pasado miércoles tras sufrir una dura caída y golpearse contra la fachada de una casa, puso ayer rumbo a Euskadi, donde será operado de las fracturas en la clavícula y en el tercer metacarpiano de la mano derecha. De esta forma, el guipuzcoano ya descansa en casa y, según cuenta su compañero Omar Fraile, está con buen estado de ánimo después del susto: "Tiene ganas de pasar por el quirófano y recuperarse lo antes posible. De madrugada ya estaba en el hotel así que eso es indicativo de que era menos grave de lo que pensábamos".