El irlandés se impuso este martes en la décima etapa del Tour de Francia, en un cerrado esprint en la isla de Ré, por delante del australiano Caleb Ewan, mientras que el esloveno Primoz Roglic se mantiene con el maillot amarillo.

El corredor del Deceuninck, que no había ganado antes en el Tour, fue el más rápido en una nerviosa llegada masiva, en la que el eslovaco Peter Sagan fue tercero, pero no pudo conservar el maillot verde de líder de la regularidad, que este miércoles lucirá Bennett.

Los favoritos al triunfo final llegaron todos en el pelotón, por lo que no hay cambios, pese a que algunos de ellos se vieron envueltos en caídas y cortes provocadas por el viento.

LANDA, "CONTENTO"

El alavés Mikel Landa (Bahrain McLaren) pasó sin novedades una página más del Tour, en una jornada marcada por el estrés desde el principio que apenas permitió beber al ciclista vasco.

"Ha sido día de mucho estrés desde el principio, por lo que contento de estar delante. Ha sido un día tenso, no me ha dado tiempo ni a beber", señaló Landa en la meta de Saint Martin de la Isla de Ré.

Landa celebró el hecho de que los resultados de los PCR realizados al pelotón en los dos últimos días hayan dado resultado negativo para la totalidad de los 165 corredores del Tour.

"En ese sentido también ha sido un día importante. Había miedo a algún positivo, pero vemos que se están haciendo las cosas bien. Hay que seguir así hasta el final".

Ante la jornada de este miércoles, de perfil llano, Landa espera "un día más tranquilo, pero ya veremos".