- El fútbol no entiende, en ocasiones, de sentimentalismos y tampoco deja espacio para digerir un éxito embriagador. César Caneda ha sido el indiscutible jefe de la defensa y uno de los principales artífices del histórico ascenso de la UD Logroñés a Segunda División. Fue un éxito rubricado el pasado 19 de julio en el campo de La Rosaleda (Málaga) tras superar en la tanda de penaltis al Castellón en un duelo directo entre dos de los equipos que lideraban la Segunda División B cuando el fútbol fue interrumpido en marzo por el coronavirus.

Tras varios años de amargos sinsabores, La Rioja volverá a tener un equipo en la categoría de plata del fútbol estatal dos décadas después y buena parte de la culpa la ha tenido este incombustible central vitoriano, que a sus 42 años confiaba en volver a degustar las mieles de competir en la liga Smartbank.

Pues bien, finalmente no será así después de que César integrara el pasado martes por la noche la numerosa lista de bajas ofrecida por la UD Logroñés de cara a la próxima campaña. Pese a que su rendimiento ha sido espectacular siendo titular en prácticamente todos los partidos, acaba de recibir un pequeño jarro de agua fría en la recta final de su intachable carrera.

El gasteiztarra confiaba en un voto de confianza por parte del club riojano en el caso de, como así ha sido, que el equipo dirigido por Sergio Rodríguez sellara el ansiado ascenso. Así lo aseguró en una reciente entrevista a este periódico en pleno confinamiento. “Me gustaría seguir un año más y aceptar el reto de intentar prepararme lo mejor posible para demostrarme, sobre todo a mí mismo, que sí puedo. Sería un reto muy bonito, pero falta el play off que quizá sea lo más complicado de todo este proceso. Luego es cuestión de que el entrenador cuente contigo, el club cuente contigo y se den todas las circunstancias. Pero a nivel mental puede ser un reto bonito que intentaré hacer realidad. Sea cual sea la decisión, la respetaré”, subrayó entonces César.

La última vez que el vitoriano compitió en Segunda División data de la temporada 2014-15, en concreto con el Mirandés. Desde entonces, el futbolista más longevo del fútbol estatal ha debido conformarse con jugar un escalón por debajo de la categoría de plata. No han trascendido las razones exactas que han impulsado a Carlos Lasheras, en su día director deportivo del Alavés y ahora responsable de la parcela deportiva de la UD Logroñés, a prescindir de sus servicios, pero todo hace indicar que la marcha de César Caneda se enmarca dentro de un proceso de rejuvenecimiento de la plantilla riojana. Además del vitoriano, el veterano portero Miguel Martínez (38 años) tampoco seguirá en el conjunto riojano.

Ahora se abre un periodo de incertidumbre respecto al siguiente paso en la carrera de César, que debe decidir si acepta alguna oferta que le pueda llegar en próximas fechas procedente de algún otro conjunto o, por el contrario, si opta por la retirada tras haber disputado hasta ahora más de 850 partidos repartidos en casi una docena de clubes (primer equipo y filial del Athletic, Aurrera, Salamanca, Sevilla, Racing, Eibar, Cádiz, Deportivo Alavés, Guijuelo, Mirandés y Logronés).

La decisión tomada por Carlos Lasheras se enmarca dentro del proceso del club riojano de rejuvener su plantilla para el futuro