DEPORTIVO ALAVÉS Aritz Castro, Víctor, Montolio, Erik, Bengoetxea, Gualda, Pablo Álvarez (Perera, min. 82), Abdallahi (Sarriegi, min. 62), José Luis, Lupu (Elejalde, min. 78) y Radulovic.

REAL VALLADOLID Samuel, Raul Navarro, Alende, Miguel Angel Rubio, Vilarrasa, Mancuso, Enrique Pérez, Víctor García, Doncel (Javier Alvarez, min. 75), Zalazar (Steven Ricardo Plaza, min. 71 - Pablo José Muñoz, min. 80), Raul Uche.

Goles Pablo Alvarez, 1-0, min. 35. Raul Uche, 1 -1, min. 54.

Árbitros Borja Martínez quien ha mostrado tarjetas amarillas a Diego Alende (minuto 38) y a Miguel Angel Rubio (minuto 67) por parte del Real Valladolid y a Gualda (minuto 20) y a Abdallahi (minuto 60) por parte del Alavés.

Incidencias Jornada correspondiente a la 28ª de la Segunda División B del Grupo II en la Ciudad Deportiva José Luis Compañón (Ibaia) ante 500 espectadores

GASTEIZ - La Segunda División B es muy exigente y el equipo de Iñaki Alonso ya se ha dado cuenta de ello. A pesar de estar realizando una más que notable temporada, el equipo continúa coqueteando con los puestos de descenso, ya que la clasificación se encuentra muy ajustada y a la mínima puedes tanto subir posiciones como bajarlas. Eso sí, los vitorianos no han estado aún en las últimas cuatro posiciones, gracias a la fortaleza que tienen como conjunto cuando juegan en Ibaia.

Ayer el MiniGlorias jugó de tú a tú contra un Valladolid que venía en buena dinámica y al que pudo ganar, pero el encuentro terminó con un empate justo, ya que los de Javier Baraja también pudieron llevarse el partido.

El partido empezó con un ritmo alto y con varias jugadas de peligro por parte del delantero Uche, quien pudo encarar a Aritz Castro en varias ocasiones, pero no acababa de encontrar bien el hueco ya que siempre se encontraba en fuera de juego. El transcurso de los minutos dejaron atrás la intensidad inicial para dar paso a la calma por parte de ambos equipos.

El Alavés se encontraba muy bien posicionado sobre el césped y el Valladolid por mucho que lo intentaba no encontraba huecos para poder generar peligro. Mientras tanto, los locales con una presión muy arriba se habían hecho con la posesión del esférico. Sin embargo, los vitorianos tampoco tenían ocasiones claras de gol.

En el minuto 30 Abdallahi - quien se encontraba jugando de extremo sustituyendo a Paulino - con un sprint de los suyos se fue hasta de cuatro jugadores para encarar a Samuel Pérez, pero el guardameta aguantó muy bien y despejó el balón al córner. En dicho saque de esquina, los defensas pucelanos cometieron una falta al borde del área y esta infracción llegaría el gol albiazul. Pablo Álvarez enseguida cogió el esférico con las manos porque tuvo muy claro que él iba a ser el ejecutor de la falta. El centrocampista golpeó la pelota a la perfección, y aunque el balón entró por el palo de Samuel Pérez, el guardameta no tuvo culpa.

Los últimos minutos de esta primera parte pertenecieron al MiniGlorias que pudo aumentar la renta en el marcador, pero ni Lupu ni Radulovic estuvieron acertados de cara a portería.

El Valladolid salió mucho más fuerte en la segunda parte y encerró a los vitorianos en su campo hasta que llegó el gol del empate. Un gol que hizo justicia a lo que se estaba viendo sobre el césped y que no tardó en llegar tras la reanudación. Uche fue el encargado de rematar una buena triangulación que empezó con centro de Víctor García y que Doncel cedió para atrás y su compañero definió a la perfección. El equipo de Iñaki Alonso tardó en despertar, pero consiguió reaccionar a tiempo y el partido volvió a igualarse para dar paso a un bonito encuentro con ocasiones en ambas porterías.

Ambos conjuntos iban a por los tres puntos, pero quizá fueron los albiazules quienes gozaron de las mejores ocasiones para llevarse el partido, pero una vez más ni Lupu ni Genis estuvieron acertados de cara a portería fallando sendas boleas y mandando el esférico demasiado alto.

Los cambios de ambos entrenadores animaron aún más el partido, que se convirtió en un correcalles bonito, pero que también dio paso a las lesiones. Por un lado, Steven José Muñoz, que acababa de saltar al terreno de juego, se rompió tras realizar dos carreras, y aún así y con poco tiempo, el extremo demostró que dará mucho de qué hablar. Y por otro lado, Pablo Álvarez tuvo que ser sustituido por un fuerte golpe. Al final, justo el empate a uno entre los dos filiales y que sirve para que el MiniGlorias continúe, poco a poco, escalando la montaña de la permanencia.