Miranda de Ebro - El Mirandés tratará de seguir alargando hoy su sueño copero y dejando fuera a un Villarreal que llega avisado de las dificultades de Anduva y que ya sufrió a los burgaleses hace años. El torneo vuelve a tener al equipo de Miranda de Ebro como protagonista. La campaña 2011-2012 será muy recordada en el club castellano-leonés, por un histórico ascenso a Segunda División y porque, pese a estar en Segunda B, saboreó las semifinales coperas.
El Athletic fue entonces el encargado de finiquitar su sueño ya que, a su categoría inferior, tuvo que llegar bajo el formato de a doble partido. Aún así, también dejó a tres Primeras por el camino, entre ellos el Villarreal, al que eliminó en dieciseisavos. Racing y Espanyol completaron el trío de la máxima categoría víctimas del Mirandés, que en esta ocasión ha tumbado al Celta y Sevilla, una muestra de su fortaleza en Anduva, que se pondrá a prueba ante un rival que, tras eliminar en la prórroga al Orihuela, ha solventado firme sus dos anteriores rondas ante Girona (0-3) y Rayo Vallecano (0-2).
El conjunto que entrena Andoni Iraola está encontrando lo que se les resiste en La Liga. Nadie gana al Mirandés desde el pasado 7 de diciembre (3-1 en Almería), pero de sus últimos seis partidos ligueros ha empatado cuatro, lo que le ha impedido acercarse más al play off.
Anduva, un fortín Sin embargo, la racha de imbatibilidad es mucho mayor en Anduva, donde solo ha perdido en su primer partido ante el Cádiz y donde hacer gol es difícil. De hecho, Pione Sisto y de Nolito son los únicos que han marcado de sus últimos seis visitantes. Iraola no podrá cambiar mucho su once. Según ha explicado en la previa del partido, habrá “pocas opciones de cambio”.
El Villarreal, por su parte, parece haber cogido una buena racha visitante y ha sido capaz de sacar tres puntos en sus tres últimas salidas. Contando la Copa, ha ganado sus últimas ocho salidas. Ahora, el objetivo del conjunto de Javi Calleja es alcanzar las segundas semifinales coperas de su historia tras las de la temporada 2014-2015. Desde ese año, el Submarino no había pasado de octavos y ahora afronta la posibilidad de quedarse cerca de una final, lo que podría aparcar un tanto las rotaciones del técnico. - E.P.
