BILBAO - La empresa manista profesional Baiko Pilota ha recibido una oferta para llevar a cabo un proceso privado de formación de pelotaris, que, según la propuesta que existe encima de la mesa de la promotora bilbaína, comenzaría desde el segundo año de la categoría alevín (12 años cumplidos en el año en que finaliza la temporada en juego) hasta el final de su carrera en juveniles (18 años cumplidos en el año en que finaliza la temporada en juego). En el borrador se refleja también el estatus de manistas precontratados por la operadora, sobre el que también se haría trabajo de tecnificación, lo cual confrontaría forma directa con las diferentes labores de las federaciones territoriales y la de Euskadi, así como con el trabajo de los clubes tradicionales. La creación de “pelotaris profesionales” es el único objetivo que reza el plan que oferta Ordu Guztietan, empresa de servicios deportivos, a Baiko Pilota, firma pelotazale que se encuentra dentro del grupo Baiko Taldea, dirigido por Joserra Garai y que cuenta con Karlos Arguiñano entre sus socios.

La promotora deportiva, que se encuentra enclavada en el potente club Lazkao Antzar Pilota Kirol Elkartea (Lapke) y que también cuenta con la explotación de los equipos de Arrasate y Arkupe de Gernika, presentó un borrador de doce páginas, en el que plantea la externalización del trabajo formativo desde la estructura de base para el beneficio de la empresa manista en el campo profesional. En base a ello, expresan que “al igual que en otros deportes del ámbito profesional, es fundamental una estructura de base para la detección, selección y desarrollo de los pelotaris talentos que integrarán en un futuro la élite de la pelota a mano profesional”. Es decir, obviaría la tecnificación que suelen llevar a cabo los actuales agentes, rompiendo el último fleco de Baiko con el campo aficionado -una vez completada la desconexión del estamento de los jueces-, ya que Ordu Guztietan y los clubes matriz ejercerían como enlaces profesionales en el mundo amateur.

En un principio, la proposición de la empresa se intentaría explotar en el fértil campo de Gipuzkoa y Nafarroa, pero la intención sería que se “ampliara” al resto de los territorios de Euskal Herria y La Rioja, siempre con un único objetivo plasmado en el proyecto: “Formar pelotaris profesionales”. Tal y como reza la propuesta, esa sería la piedra angular sobre la que orbitan el resto de actividades, introduciendo el ámbito “profesional” desde edades de deporte escolar, gestionado directamente por las diputaciones forales. En ese orden de cosas, el club lazkaotarra se convertiría en el “filial de Baiko” en zona guipuzcoana y se encargaría de gestionar los “talentos”. Con todo, según Ordu Guztietan, el proyecto estaría dotado de un servicio de ojeadores, cuyo trabajo sería “semanalmente ir a ver partidos para detectar, seleccionar y hacer seguimiento a pelotaris talentos y promesas”.

Además, en las categorías de segundo curso de alevines (12 años), infantiles (13 y 14 años cumplidos en el año en que finaliza la temporada en juego) y cadetes (15 y 16 años cumplidos en el año en que finaliza la temporada en juego) se establecería una “sesión técnica de captación” al trimestre. Entre los más mayores, incluyendo a los pelotaris ya en nómina de Baiko como precontratados, se oferta una “sesión técnica semanal”. Se contempla también un “campeonato Fundación Baiko”, en el que únicamente jugarían “pelotaris seleccionados” y su celebración quedaría enclavada entre los meses de “junio y julio”.

Para extraer conclusiones sobre el proyecto, Ordu Guztietan ofrece a Baiko Pilota la ejecución de tres informes: “Una evaluación inicial, otra procesual y una final”. Todo ello, con un coste neto de 2.500 euros mensuales, a lo que habría que añadir un 21% de IVA, con lo que la oferta final asciende hasta los 3.025, sin contar la infraestructura (alquiler de frontones) y material (pelotas y ropa deportiva de los manistas). En definitiva, 36.300 euros al año.

Posibles consecuencias Actualmente, Baiko posee un entramado de precontratados que se extiende por todos los territorios y supera la quincena de protagonistas en edades de formación. La base del proyecto de la empresa bilbaína, de hecho, es el frontón Bizkaia de Bilbao, en el que varios días a la semana los jóvenes se ejercitan a las órdenes de los técnicos de firma vizcaína, en vez de con sus clubes.

Sin embargo, aceptar la propuesta de Ordu Guztietan, según las fuentes consultadas, podría suponer un paso hacia la ruptura con el mundo federativo, puesto que hasta el momento son las Territoriales, la Vasca y la Navarra las que se dedican a ejercer labores de tecnificación con manistas de esas edades y son las responsables del campo aficionado. Asimismo, la creación de un bloque matriz en el que se integren los mejores pelotaris de la cantera podría debilitar el tejido amateur y afectar de forma severa al resto de clubes, que se verían mermados desde edades muy tempranas.