Madrid - El ciclista alavés Mikel Landa reconoce que una de las razones por la que decidió abandonar el Movistar Team es el hecho de ser el líder único de su nuevo equipo, el Bahrein, con cuyo maillot apuntará al Tour de Francia de 2020. “Estoy muy emocionado y feliz de tener la oportunidad de liderar mi nuevo equipo de cara a la próxima temporada. Todavía no conozco mi programa, tenemos que hablar, pero para el equipo el Tour de Francia es el objetivo. Estoy listo para liderar un equipo. Tengo ese objetivo y eso es lo que estaba buscando”, asegura Landa en declaraciones a la página especializada Cyclingnews.
Landa se refiere al Bahrein como “un gran equipo” que le dará la oportunidad de ser “el líder en una gran vuelta”, y aunque aún no conoce la plantilla que le arropará en sus proyectos, no se siente por ello “preocupado”. Deberá soportar la presión de la próxima temporada, en la que tendrá que luchar, entre otras cosas, contra el dominio del Ineos. Un corredor con un tercer puesto en el Giro 2015 y un cuarto en el Tour 2017 que pretende al fin ser un líder único y no repetir las experiencias anteriores en Movistar, Sky o Astana. En el equipo español se vio obligado a compartir galones con Alejandro Valverde y Nairo Quintana, en el británico tenía por delante a Chris Froome y en el Astana sacrificó sus opciones por Fabio Aru. Situaciones definidas como “complicadas” por Landa. “Si tienes un compañero que tiene el mismo objetivo que tú es más complicado. El equipo tienen que trabajar para los dos y no solo para uno. Un día puedes sentirte bien, y tu compañero de equipo no tan bien. Es complicado”.
Landa se refiere a su experiencia de este año en el Tour con Movistar. “Éramos tres corredores con el objetivo de estar en el podio, pero no fue fácil. No era mi decisión, sino del director. Quizás no gané tanto como esperaba pero aprendí mucho y tuve una buena experiencia”. - Efe