BARCELONA. Asimismo, el acuerdo establece que se prevé una opción de compra a final de la temporada por el montante de 120 millones de euros.
"El FC Barcelona expresa públicamente su agradecimiento a Philippe Coutinho por su compromiso y su dedicación y le desea mucha suerte en esta nueva etapa", señala el comunicado emitido por el FC Barcelona.
Coutinho ya no participó en el partido del viernes contra el Athletic Club y vio el encuentro desde el graderío.
Después de haber aparecido como pieza de cambio para abaratar el posible fichaje de Neymar por el Barcelona, finalmente su salida será hacia Alemania para jugar en la Bundesliga.
El internacional brasileño viajó ayer domingo un avión para viajar a Múnich, donde ya visitó las instalaciones del Bayern.
Coutinho llegó al Barcelona en el mercado de invierno de hace dos temporadas, convirtiéndose en la contratación más cara del club, después de desembolsar el Barcelona 120 millones de euros para adquirir sus derechos del Liverpool, fichaje que además tenía 40 millones en forma de variables.
A pesar de tratarse de un jugador de nivel contrastado, su tránsito por el Barcelona no puede describirse más que como un fracaso, aunque sobre el grado de culpa muchos apuntan que tiene más de un propietario, ya que Coutinho ha jugado en un sistema al que le ha costado adaptarse y, además, muchas veces lo ha hecho fuera de su posición natural, que es la de interior.
El caso es que Coutinho ha dejado de ser historia del Barcelona y sobre él pesará que el fichaje más caro de la historia del club pasó sin pena ni gloria en la temporada y media que jugó como azulgrana tras llegar al club por un precio desorbitado y, sobre todo, señalado como el sustituto de Andrés Iniesta, una responsabilidad que le pesó. Además, es un jugador con un perfil diferente.
Abandona el Barcelona tras haber jugado 76 partidos, en los que ha marcado 21 goles (13 en la Liga, 5 en la Copa y 3 en la Liga de Campeones).
A pesar de tratarse de un jugador reservado, llegó a explotar un día contra los que le silbaban en el Camp Nou, en el partido contra el Manchester United, al no celebrar un gol y taparse los oídos con los dedos en señal de protesta, lo que enojó aún más a sus críticos.
Días después, justificó que el gesto lo había dirigido a la prensa. No obstante, a partir de ese abril de 2019 estaba cantado que Coutinho no seguiría en el Barça.
Con esta salida de Coutinho, el Barcelona se ha desprendido este verano de más de media docena de jugadores, algunos de ellos por finalización de contrato y otros con traspaso, como el caso de André Gomes (Everton, 25 millones de euros), Denis Suárez (Celta, 13 millones), Emerson (Betis, 6 millones), Jerper Cillessen (Valencia, 35 millones) y Malcon (Zenit San Petersburgo, 40 millones).
A ellos se suma también Paco Alcácer, por quien el Borussia Dortmund ejecutó el pasado noviembre una cláusula de compra por 21 millones de euros.
Los futbolistas que han partido por finalización de contrato son Murillo (Valencia), Boateng (Sassuolo) y Vermaelen (Vissel Kobe), mientras que Marc Cucurella ha sido cedido al Getafe.