Vigo - La continuidad de Iago Aspas y los fichajes de Santi Mina y Denis Suárez elevan la exigencia del Celta de Vigo, con Europa como principal objetivo, aunque desde el club prefieran no mirar tan alto para evitar un susto como el del pasado curso, cuando sintió la amenaza del descenso hasta el final. Desde la última temporada de Berizzo, cuando el Celta alcanzó las semifinales de la Europa League y Copa del Rey, los seguidores no estaban tan ilusionados con su equipo. La operación “retorno” ha disparado la confianza del celtismo, pese a la salida del goleador uruguayo Maxi Gómez. El inicio de curso es de máxima exigencia, ya que se enfrentarán a cuatro de los cinco primeros clasificados en las primeras cinco jornadas: Real Madrid, Valencia, Sevilla, Granada y Atlético de Madrid. - Efe