Bilbao - El Athletic encara el nuevo curso con el principal objetivo de evitar el desasosiego que vivió la temporada anterior durante el penoso arranque, 11 puntos en 14 jornadas, que le tuvo meses amenazado de descenso y también con la intención de despedir como se merece a Aritz Aduriz, uno de los grandes de su historia y figura clave en una última década con sello europeo. En lo deportivo no presentan grandes cambios y ni siquiera el entrenador es novedad. Continúa Gaizka Garitano, el técnico que cambió el rumbo de un grupo a la deriva y obró el milagro de, en pocos partidos, pasar del miedo a perder la categoría, algo que no ha ocurrido nunca, a mirar de nuevo hacia a una Europa que se les escapó en la última jornada. Si el remate de Iñigo Martínez en el descuento del choque en el Sánchez Pizjuán llega a ir unos centímetros por debajo del larguero hubieran sumado un nuevo curso en Europa en una década acostumbrado a ello. Con Aduriz de estandarte.
Este año el ariete no apunta a titular. El encargado de rematar el juego del equipo será Iñaki Williams, con papel de superestrella al ampliar hasta 2028 el contrato que contempla como cláusula de rescisión de 135 millones. Su principal aliado será Raúl García justo por detrás en una alineación similar a la del año pasado. Si acaso con la novedad de Unai López al lado de Dani García en el doble pivote e Iker Muniain de nuevo escorado en una banda, este año la derecha, ante la imposibilidad de compartir la media punta con Raúl. Iñigo Córdoba completaría por la izquierda, mientras que en la portería estaría Iago Herrerín y en los centrales Yeray Álvarez e Iñigo Martínez. Ander Capa y Yuri Berchiche serán los laterales titulares.
Clásicos rojiblancos y de la competición como Aduriz, Beñat, De Marcos, Balenziaga, San José e Ibai Gómez, junto a los jóvenes Simón y Núñez, ambos campeones de Europa sub’21, se presumen de inicio en la segunda unidad de la plantilla. Un plantel que, después de arrancar con 33 jugadores, toma la forma que quiere Garitano de dos futbolistas por puesto tras las salidas de Andoni López, Nolaskoain e Iñigo Vicente, todos cedidos, y a la espera de una solución similar para Ganea y Villalibre. Será novedad Larrazabal, el prometedor hijo de otro clásico, Aitor, y que juega en el lado opuesto al de su padre. Es decir, de extremo derecho. Además de él, estarán Daniel Vivian y Oihan Sancet, con ficha del filial pero a las órdenes de Garitano. Por último, Kodro, Vesga y los lesionados Lekue y Guruzeta, este de larga duración, parecen destinados a un rol más residual si no acaban también saliendo.