Eibar - El Eibar arrancará su sexta temporada consecutiva en Primera División, hecho totalmente insospechado hace una década, y lo hará con los pies en la tierra, sin mirar más allá de la salvación, pero sin renunciar a cotas mayores y tratando de quedar en la zona alta de la tabla. La mejor noticia ha sido la continuidad del principal precursor del milagro, el preparador José Luis Mendilibar, que seguirá imprimiendo su sello de identidad a los armeros. El haber tenido menos bajas que otros años ha permitido que la pretemporada haya sido menos táctica, ya que la mayoría de los futbolistas conocen a la perfección la idea de fútbol del técnico.

Eso sí, las marchas que ha sufrido han sido notables, hombres de mucho peso en su zona del campo que han abandonado el Eibar en busca de retos mayores. Son Rubén Peña, Jordán y Cucurella, que a priori serán difíciles de suplir en vista del rendimiento que ofrecieron la pasada campaña. Pero la secretaría técnica no se ha dormido en los laureles y, nada más conocerse esas bajas se puso manos a la obra para tratar de igualar, e incluso mejorar, la plantilla. Álvaro Tejero, formado en la cantera del Real Madrid, y Roberto Correa, ex del Cádiz, llegan para suplir a Peña en el lateral derecho con garantías. En el centro del campo, la marcha de Jordán se ha cubierto con el fichaje de Edu Expósito, un centrocampista con muy buen cartel procedente del Deportivo de la Coruña.

Otra de las noticias destacadas del mercado de fichajes ha sido, sin duda, la vuelta de Inui, algo que no ha sentado demasiado bien en un sector de la afición. Y es que el jugador japonés decidió tomar rumbo a Sevilla la pasada temporada para jugar en el Betis tras haber dado su palabra de renovar con el conjunto armero, y hay quien aún no perdona esa suerte de “traición”, por lo que al japonés no le va a quedar más remedio que volver a ganarse el cariño del público de Ipurua. En la delantera, Mendilibar no ha terminado de confiar en Marc Cardona, que estaba cedido por el Barcelona y tuvo que hacer las maletas, y ha logrado la incorporación de Quique González, ariete proveniente del Dépor, que tendrá que competir por un puesto con su tocayo Kike García, Charles y Sergi Enrich. En la portería, la vuelta de Yoel garantiza tener dos porteros de una calidad incuestionable, y el gallego se disputará la titularidad con un Dmitrovic que fue, sin duda, uno de los grandes protagonistas del equipo armero la pasada temporada.

Ipurua, en plena renovación de una de sus gradas, no podrá presenciar los tres primeros partidos de Liga, pero espera un equipo que no cambie su estilo y que le haga vibrar en cada partido en casa. - Efe