Vitoria - El pasado domingo concluyó en el frontón de Ogueta la quinta de las cinco finales del Cuatro y Medio que se disputaron durante todo el fin de semana. El último encuentro fue en categoría cadete entre Mikel Sanz y Endika Altube, con victoria para el segundo pelotari. El sábado se jugaron el resto de finales por la txapela en el mismo frontón de Ogueta, que comenzó el festival a las 10.00 horas. Se disputaron las finales de juveniles entre Asier Del Campo y Aranbarri (22 a 3), la gran final del sub-22 entre Martínez de Murguia y Otxoa (22-19), la final femenina entre Leire Garai y Naroa Aguirre (22-10) y la final senior entre Iribarren y Uribe, que ganó el primero por 22 a 10 y puso el colofón a un gran día de pelota el sábado en el frontón de Ogueta.

El partido más esperado del fin de semana era el disputado entre Iribarren y Uribe, correspondiente a la final senior del Cuatro y Medio. El primero fue claro dominador del duelo y no dejó a Uribe desarrollar su juego con facilidad. Ambos llevan sobre sus hombros un calendario que nadie, y menos sus manos, puede aguantar o al menos rendir a un nivel regular de juego. Quizá por ello Uribe no estuvo a la altura de su gran juego. Trató de equilibrar el juego al principio, pero a poco a poco se dejo ir ante la facilidad rematadora de Iribarren, un pelotari en racha que venía de ganar el torneo de Lakua. Finalmente, el propio Iribarren se impuso en la gran final del Cuatro y Medio senior por 22 a 10.

Por otro lado, tuvieron lugar el sábado los otros tres encuentros por la txapela previos a la gran final senior. La jornada la comenzaron Asier del Campo y Aranbarri disputando la final de juveniles. Se presumía más pelea que la que en realidad fue. Todo se decidió demasiado rápido en favor de Asier del Campo, que derrotó por 22 a 3 a un desdibujado Aranbarri, que estuvo muy lejos de su habitual rendimiento en la cancha. El segundo partido fue en categoría sub-22 y lo jugaron entre Otxoa, y Martínez de Murguía, que jugó en vez del lesionado Yuste. Otxoa se presentó en la lucha por la txapela como el claro favorito al triunfo pero estuvo muy desdibujado, fallón, sin consistencia y con la cabeza en otra parte. Finalmente se dejó la txapela en manos del combativo e irreductible Martínez de Murguia, que ganó el encuentro por un ajustado 22-19.

En la final femenina, Leire Garai se impuso por 22-10 a Naroa Aguirre. La alavesa estuvo muy acertada y le entraba todo, al contrario de lo que le sucedió tan solo un día antes en la final de Lakua que cayó ante Bergara 18-10. Finalmente, el broche final lo pusieron Mikel Sanz y Altube disputando la final de cadetes el domingo. Se presumía que sería una final mucho más competida, pero se la llevó el pelotari de Txukun, Endika Altube por 22-17 ante un rival que comenzó más seguro, más agresivo pero menos decidido al final. En la misma ceremonia, Julen Vacas recibió la txapela de campeón de paleta argentina en categoría cadete. - DNA