VALLADOLID Masip; Moyano, Kiko Olivas, Calero (Joaquín, m. 64), Nacho; Waldo, Alcaraz, Míchel, Óscar Plano (Toni, m. 76); Ünal (El Hacen, m. 88) y Guardiola.

GIRONA Bono; Ramalho, Muniesa (Doumbia, m. 76), Bernardo Espinosa, Juanpe, Raúl Carnero (Douglas Luiz, m. 64); Pere Pons (Pedro Porro, m. 86), Granell, Borja García; Portu y Cristhian Stuani.

Gol 1-0, m.67: Míchel.

Árbitro Juan Martínez Munuera (Comité valenciano). Amonestó a los locales Óscar Plano, Ünal, Alcaraz y Kiko Olivas; y a los visitantes Muniesa, Juanpe y Stuani.

Estadio José Zorrilla. 19.106 espectadores.

Valladolid - El Valladolid abandonó ayer los puestos de descenso a costa de un Girona al que derrotó en Zorrilla gracias a un gol de Míchel. En un duelo entre dos equipos muy necesitados, el conjunto local dio un gran paso hacia la permanencia para, de rebote, meter al Girona en un aprieto muy gordo.

Míchel, con un gran gol, potente e incontestable, dio este martes, festivo en Castilla y León, la victoria al Real Valladolid, que no ganaba desde el 27 de enero, ante un Girona muy pasivo que, con esta derrota, se hunde en la clasificación.

Los locales dejaron constancia de su entrega desde el primer minuto. Mucho en juego. Todo, de hecho, para el conjunto blanquivioleta, por estar en su casa, ante su afición, y porque partía con dos puntos menos respecto a su rival, un Girona que volvió a salir con cinco defensas.La tensión se palpaba, en el campo y en las gradas, ante el arranque de los catalanes. Era fundamental superar el miedo. Y los de Sergio González lo dejaron aparcado - Efe