Melbourne (Australia) - Para no ser menos que Rafa Nadal, que se había clasificado para la final del Abierto de Australia al arrollar al griego Stefanos Tsitsipas (6-2, 6-4 y 6-0), el serbio Novak Djokovic, número del uno, apabulló al francés Lucas Pouille, por 6-0, 6-2 y 6-2, para citarse con el balear en el duelo por el título, que será mañana a partir de las 9.30 horas.

El tenista de Belgrado alcanzó su séptima final en Melbourne Park, lo que le sirvió para igualar al suizo Roger Federer como jugador con más finales disputadas en la historia del major australiano. Además, el serbio confirmó su condición de bestia negra para los tenistas franceses después de conseguir su 27ª victoria consecutiva frente a jugadores galos en torneos de Grand Slam.

Djokovic, que ha ganado sus seis finales disputadas en Melbourne, llegará a la cita más importante del torneo en plenitud física después de superar tanto los cuartos como las semifinales con una facilidad pasmosa. Tan sólo necesitó un set y medio ante el japonés Kei Nishikori, que se lesionó en cuartos, y en las semifinales no necesitó más de una hora y media de juego para sentenciar a Pouille.

Quien también asistirá fresco a la cita más importante del torneo será Nadal, después de que cerrara sus seis encuentros previos a la gran final sin ceder ningún sólo set, así como por disponer con un día más de descanso respecto al serbio.

Con todo ello, la final de 2019 supondrá una reedición de la final más larga de la historia del Grand Slam, la cual se disputó en Australia en 2012 y tuvo como ganador al actual número uno, quien venció por 5-7, 6-4, 6-2, 6-7 (5) y 7-5 tras 5 horas y 53 minutos de juego.

“Nadal es mi gran rival” Djokovic se mostró ayer convencido de que la final de mañana será apasionante: “Los partidos contra Rafa son una experiencia única. Saquen entradas para ver la final”. El serbio explicó que el balear es el rival más grande de toda su carrera por “todos los partidos épicos” que han disputado.

En concreto, se han enfrentado en 52 ocasiones (Djokovic y Federer lo han hecho en 47), y el serbio tiene algo claro: “Podemos prometer una cosa y es que vamos a dejarlo todo en la pista. He jugado contra Nadal muchos partidos, encuentros épicos. También en esta pista, como aquél de 2012 que duró casi seis horas. Espero que esta vez no dure tanto”.

“Nadal está jugando impresionantemente bien durante todo el torneo. Esta final llega en el momento perfecto para ambos porque yo tampoco he jugado mal en mis últimos dos partidos. La gente va a disfrutar”, auguró Djokovic. “Jugar contra Nadal requiere un enfoque táctico diferente. Necesariamente no quiero alargar los puntos contra él. Creo que mis primeros golpes están funcionando bastante bien durante este torneo y me estoy sintiendo bastante cómodo en la pista”, admitió. “Nadal ha mejorado su saque, Con todas las cualidades que posee, eso hace de él un rival todavía más difícil de vencer”. - Efe