Barcelona76
CSKA84
BARCELONA Heurtel (5), Ribas (3), Claver (17), Singleton (7), Tomic (3) --quinteto inicial--; Seraphin (14), Pangos (5), Hanga (8), Oriola (6), Kuric (8).
CSKA De Colo (25), Hackett (-), Kurbanov (17), Peters (8), Hunter (8) --quinteto inicial--; Bolomboy (-), Antonov (-), Rodríguez (10), Clyburn (8), Kulagin (-), Hines (8)
Parciales 20-20, 21-24, 20-19 y 15-21.
Árbitros Belosevic, Rocha y Difallah. Seraphin, eliminado por 5 faltas.
Pabellón Palau Blaugrana. 6.007 espectadores.
barcelona - El Barça Lassa perdió este viernes contra el CSKA Moscú (76-84) en el Palau Blaugrana un duelo muy igualado hasta los momentos finales, cuando los rusos se hicieron con el pulso definitivo para desquiciar a un rival que murió luchando, y que deberá buscar cómo afianzar su puesto de ‘playoff’ al tiempo que esquivar otra mala racha que resucite su desconfianza.
Maccabi y CSKA están alejando al Barça de la cuarta posición, pero la imagen dada por el equipo culé ante los rusos, que jugaron cerca de su mejor nivel para demostrar poderío y hegemonía al resto de rivales, fue buena. Los de Svetislav Pesic lucharon hasta no poder más, y sucumbieron a los 25 puntos de Nando De Colo y a la magia de Sergio Rodríguez, éste con 10 puntos y 7 asistencias.
Sin un hombre con la muñeca caliente en el momento clave, al Barça le costó doblegar a un CSKA duro, fuerte, serio atrás y con constancia en ataque, sin notar la lesión de Cory Higgins. Enfrente sí se echó en falta un liderazgo, con Thomas Heurtel menos afortunado que en las últimas jornadas, y pese al buen hacer de Víctor Claver (17 puntos) no se le vio en pista al final.
Con esta derrota, el Barça sigue sexto en la tabla con un balance de 11-9. Pero perdió una gran oportunidad de acercarse a la cabeza. Y es que desde el 65-65 a falta de apenas cuatro minutos, empezó a descomponerse. Los nervios, el físico o haberse visto con un +9 previamente, todo afectó a los catalanes. Justo lo contrario que a un CSKA que acabó muy fuerte para enrocarse en la tercera plaza y no alejarse del tren del liderato.
Pero fue la igualdad entre ambos equipos la que mandó en un partido disputado hasta prácticamente el final. Para nada se pareció a la cita de la primera vuelta en Moscú (95-75); aquí la iniciativa fue pasando de un equipo a otro, con 41-44 al descanso, hasta bien entrado el último cuarto, cuando se tuvo que decidir el choque con fortuna para unos y desdicha para otros.
El Barça llegó a ponerse 9 puntos arriba en el tercer periodo, ayudado por una serie de personales consecutivas del CSKA y el acierto desde la línea de tiros libres, la balanza volvió a igualarse. Y lo hizo al fallar Kevin Pangos dos tiros libres, rompiendo la racha del equipo, y un 2+1 para unos rusos que no le dieron la espalda al partido en ningún momento.
No hubo más colchones como ese que tuvieron los blaugranas, excepto con la puntilla final del CSKA. Defensas serias en los dos lados de la pista y mucho respeto en ambos lados propiciaron un marcador más bien bajo, y que no hubiera un despegue definitivo previo. Si De Colo no hubiera estado tan acertado en el triple, el Barça podría haber explicado un cuento bien distinto, pero el galo fue una pesadilla. Tocará seguir remando, fuera de casa y en el Palau. - E.P.