madrid - El ex jugador y periodista deportivo británico Michael Robinson padece un melanoma avanzado con metástasis, “uno malo que no tiene cura”, y ha afirmado que aunque es una batalla que prefería “no librar” está convencido de que la va a “ganar”.

“El día 30 de octubre tenía un bulto en mi axila. Cuando me lo sacaron me dieron una noticia tremenda: ‘Michael, tienes cáncer, uno malo que no tiene cura’. De lo demás no me acuerdo, porque pensaba que era una pesadilla, que no era de verdad”, señaló ayer en una entrevista en el programa La Ventana de la Cadena Ser.

Robinson, de 60 años, explicó cómo fue aceptando la noticia. “Tengo melanoma. El melanoma no reside en la axila, sino en la piel; había metástasis, había viajado y se manifestó en mi axila. Durante un par de días yo no sabía muy bien qué día era, pensaba que era un mal sueño, y que era un error. Creía que al día siguiente en el hospital me iban a decir ‘Michael, nos hemos confundido’. Yo me encontraba como una flor. Estaba francamente en el suelo”, subrayó. “Un día, tomando una cerveza, me dije que la ciencia había hablado: tenía cáncer, y uno malo, avanzado. La ciencia había dictado una serie de circunstancias, pero vivir lo decido yo, es mi potestad decir cómo yo voy a vivir. Yo no quiero que mis hijos o mi mujer puedan decir que hay un Michael previo a la enfermedad y un Michael post. De repente, me sentí empoderado; yo voy a decidir cómo voy a vivir”, continuó.

Además, explicó que con su mujer buscó “una segunda opinión” y que la encontró en el Hospital de La Paz, y cómo se lo explicó a su compañero Julio Maldonado, Maldini. “Mira, Maldini, estoy jugando un partido y en estos instantes estoy perdiendo 2-0. Pero ojo, falta media hora y tengo a Messi quitándose el pantalón del chándal y va a entrar y jugar para mí. Esto lo voy a ganar seguro, porque Emiliano Calvo, mi oncólogo, es madridista, pero yo le he llamado Messi. Es el padre de la inmunoterapia, que está salvando vidas y, desde luego, va a salvar la mía”.

El periodista de Movistar+ y Cadena Ser desveló que ya ha comenzado a tratarse y que se encuentra con mentalidad positiva. “Preferiría no tener que librar esta batalla, pero lamentablemente estoy en esta lucha y tengo claro que la voy a ganar”, concluyó.

Robinson recaló en la Liga española en 1987 de la mano de Osasuna, donde militó hasta 1989. Su mayor éxito lo alcanzó en 1984 con la conquista de la Copa de Europa con el Liverpool; además, jugó en el Preston North End, el Manchester City, el Brighton & Hove Albion y el Queens Park Rangers. - E.P.