REAL SOCIEDAD: Moyá; Zaldua (Min. 46, Sandro), Aritz, Navas, Kevin; Illarramendi, Zubeldia, Merino (Min. 13, Rubén Pardo), Zurutuza; Willian José y Oyarzabal (Min. 76, Jon Bautista).
VALENCIA: Neto; Rubén Vezo, Paulista, Diakhaby, Lato; Carlos Soler, Parejo, Kondogbia (Min. 75, Coquellin), Cheryshev (Min. 65, Guedes); Batshuayi (Min. 67, Rodrigo) y Gameiro.
Goles: 0-1. Min. 35; Gameiro.
Árbitro: Gil Manzano (Comité Extremeño). Amonestó a Zubeldia, Sandro, Lato, Cheryshev, Neto, Vezo y Carlos Soler.
Estadio: 23.577 espectadores en Anoeta.
Donostia - El Valencia se llevó un merecido triunfo de Anoeta con un gol de Kevin Gameiro, lo que permite sumar la primera victoria de la temporada en el casillero del equipo de Marcelino, García Toral, sancionado en la grada en el encuentro de ayer. Demostraron de inicio tenerse mucho respecto, el partido se jugaba en el medio campo sin otras circunstancias reseñables en los primeros minutos que la salida por lesión de Mikel Merino a los 13 minutos y un remate de Kondogbia que Moyá controló con su mirada porque no fue a palos.
El conjunto visitante se descuidaría en el minuto 33, cuando dejó entrar por banda a Zurutuza, que combinó con Kevin para que este exhibiera un duro remate que obligó a Neto a hacer la intervención del primer tiempo, y evitar el que habría sido primero gol donostiarra. El que sí entró, sin embargo, sería el del equipo che instantes después, tras un error en el pase de Raúl Navas que entregó un balón al rival, llegó a Cheryshev y el centro de éste lo remató sin oposición en la línea de gol Gameiro.
La clave, en el minuto 66 La Real Sociedad pudo haber encontrado el premio que buscaba en el minuto 66, en una gran acción del jugador Rubén Pardo que terminó derribado en el área visitante. El árbitro señaló penalti y Willian José no pudo batir a un excelente Neto. Los locales, de ahí hasta el final, bajaron notablemente durante los minutos que faltaban, y parecieron dar por imposible al menos el empate, lo que contrastó con la tranquilidad valencianista que no sufrió en absoluto. - Efe