Vitoria - Solo hubo un color ayer en el derbi alavés en Olaranbe. Mejor dicho, hubieron dos: el azul y el blanco. Tanto el Alavés como el Aurrera arrancaron la liga goleando a sus rivales, pero en la segunda jornada quedó claro quién va a luchar por el ascenso y quién tendrá el objetivo de mantener la categoría. La entidad del Paseo de Cervantes ha hecho una gran apuesta por su equipo femenino de Segunda División, que ha pasado de salvar la categoría en la última jornada la temporada pasada a pasar por encima de sus rivales sin piedad. En la primera jornada las Gloriosas se impusieron por siete goles a cero y ayer hicieron lo propio con el Aurrera, cero a cinco.
El conjunto visitante entró en el partido con mayor intensidad que las rojillas y dejó patente su superioridad al llegar al descanso con dos goles de ventaja, gracias a los tantos de Naia y Ane Miren, esta última jugadora del Aurrera hasta la temporada pasada. La atacante no tuvo piedad con su antiguo equipo y volvió a anotar en la segunda parte. Sus compañeras Alba y Amancay ampliaron la diferencia y pusieron el 0 a 5 definitivo en el marcador, reflejo de lo que se vio en el terreno de juego. Las albiazules no dejaron de apretar al final y eso les permitió mantenerse en lo alto de la tabla del grupo 2 de la Segunda División femenina, con 12 goles a favor y ninguno en contra. El Aurrera, por su parte, tendrá que rehacerse de este duro golpe sufrido en Olaranbe.
Objetivos diferentes Aunque el año pasado ambos equipos rindieron a un nivel similar, el Aurrera no debe venirse abajo, ya que el Alavés cuenta con mayores recursos y se ha reforzado con jugadoras procedentes de distintos lugares del mundo. Las rojillas tendrán la semana que viene la dura misión de enfrentarse al Atlético Revellín riojano, uno de los equipos fuertes del grupo. Las Gloriosas, por su parte, todavía no han salido de Vitoria, ya que el único partido que han jugado como visitantes fue el disputado ayer en Olaranbe. Tampoco viajarán la semana que viene, pues recibirán la visita del CD Oliver zaragozano en Ibaia.