La fuga se hizo más rápida de lo que esperábamos. Fue bastante atípico cómo se formó la escapada, que para el kilómetro 10 ya estaba consolidada con doce corredores. Habitualmente suele haber más pelea para que se fructifique la fuga. Suele haber mucha guerra y en ocasiones se lucha hasta el kilómetro 60 o 70. Se metió gente peligrosa, aunque no para la general. No hubo prisa para que el pelotón diera caza. El Groupama del líder tiró, pero sin volverse loco, así que vía libre para la fuga. Finalmente venció Ben King, que está en racha y logró su segundo triunfo. Supo rematar ante Mollema o De Gendt, arrancando de lejos. Por lo demás, en el pelotón hubo mucha batalla para coger la posición y entrar bien situados en Candelario porque sabíamos la trampa que nos esperaba antes de afrontar La Covatilla. Salvamos la situación sin problema, posicionando bien a Miguel Ángel López. En un principio él no tenía ganas de guerra pero se vio con buenas piernas. Está muy bien situado en la clasificación general, así que nuestra valoración hasta ahora es muy buena. Una vez más, la general de la Vuelta está muy apretada, con todo abierto y muy pocas diferencias entre los diez primeros de la clasificación. Es el modelo que le gusta a la organización. Parece que la carrera no se decidirá hasta la última semana.