Donostia - El ciclista esloveno Primoz Roglic, cuarto clasificado en el Tour de Francia, y el francés Julian Alaphilippe, ganador de la montaña en la ronda gala, serán dos de los grandes favoritos a adjudicarse hoy la edición número 38 de la Clásica San Sebastián, una de las más importantes del concierto internacional. Roglic, uno de los grandes aspirantes a cruzar la pancarta de meta en primera posición, demostró en las elevadas cotas del Tour que es un gran rival cuando está en forma y el perfil, con un duro puerto a escasos kilómetros del final, no solo no le perjudica en absoluto sino que añade otro aliciente a un ciclista que llega con una motivación especial con miras a la general del UCI World Tour, tras ganar esta temporada el Tour de Romandia y la Vuelta al País Vasco.

El francés Julian Alaphilippe, otro de los animadores en Francia, ganador de dos etapas y muy presente en las escapadas, Bauke Mollema, Tony Gallopin o Greg Van Avermaet serán otros de los aspirantes al triunfo, entre los que debería haber estado Luis León Sánchez, que ha vencido dos veces en la capital guipuzcoana, si no hubiera sufrido la grave lesión en el Tour de Francia. Ninguno de ellos tendrá que enfrentarse a uno de los mejores especialistas en esta prueba, el murciano Alejandro Valverde, quien comunicó a última hora que no iba a disputar la carrera, en la que había sido inscrito por el Movistar.

La nómina de corredores vascos también cuenta para las apuestas finales, ya que estarán en la línea de salida Mikel Landa y los dos hermanos Izagirre, los tres muy activos en la ronda gala, mientras que el vencedor sorprendente de la pasada edición, el polaco Michal Kwiatkowski, correrá en la vuelta de su país que se inicia también hoy y se borra de la lista de favoritos.

El recorrido, muy sinuoso con ocho pasos de montaña y 228 kilómetros, que el calor se encargará de endurecer más todavía, hará la criba previa para separar el grano de la paja, ya que los finales de esta clásicas se disputan siempre entre un selecto grupo de corredores.

La gran novedad técnica en esta edición será la colocación a cada corredor de un dispositivo GPS que mejorará el seguimiento de la Clásica, además de suponer un beneficio para la seguridad del propio pelotón en la primera carrera estatal en la que se implanta esta tecnología.

Markel Irizar, un año más Por su parte, el equipo Trek-Segafredo dio a conocer ayer la renovación por una temporada más del veterano corredor guipuzcoano Markel Irizar, que en 2018 cumple su novena temporada en las filas de este conjunto. Irizar, de 38 años, se mostró “encantado de tener la oportunidad de permanecer con el equipo un año más”. “La temporada 2019 será la décima en este equipo, así que puedo decir que este es mi equipo. Quiero agradecer a los patrocinadores y a la dirección del equipo la confianza que han tenido a lo largo de estos años”, agregó. - Efe